Cuarto largo de Paul Verhoeven, del que es guionista y director. Se basa en las memorias autobiográficas de Erik Hazelhoff Roelfzema, uno de los creadores de la Resistencia holandesa. Se rodó en Amsterdam, Leiden, Londres y plató, con un abultado presupuesto de 2,5 M dólares. Nominado a un Globo de oro (película extranjera), ganó el LAFCA (film extranjero). Producida por Rob Houwer, se estrenó el 22-IX-1977.

La acción tiene lugar en Leiden, Amsterdam y Londres entre septiembre de 1938 y mayo de 1945. Narra la historia de Eric Lanshoff (Rutger Hauer) y varios compañeros de Universidad, que se vieron arrastrados por los acontecimientos que siguieron a la ocupación nazi de Holanda. Eric es renuente a incorporarse a la Resistencia, pero se ve obligado a ello y a ser piloto de la RAF hacia finales del conflicto, lo que le convierte en héroe nacional.

La película constituye un relato serio, honesto y sincero, de la desolación que la guerra llevó a Holanda. Pese a la hipersexualidad del héroe real, la obra sólo ofrece un breve apunte de la relación de Lanshoff con Susan (Susan Perhaligon). Evita los excesos y los triunfalismos: la acciones de Lanshoff terminan en fracaso o rinden unos resultados contradictorios y de escasa trascendencia. Los amigos de Universidad, fotografiados un día para el recuerdo, reaccionan ante la guerra de maneras diferentes. Jan es judío y huye del país, pero es detenido y fusilado en un paraje de inmensa belleza. Otro se desentiende de lo que ocurre, concentra la atención en el estudio y se gradúa. Robbie es uno de los primeros que se une a la Resistencia, pero para salvar a su novia judía acepta traicionar a los suyos. Otro es hijo de madre alemana y se incorpora al ejército de invasión. Guus LeJeune (Jeroen Krabbé), el mejor amigo de Lanshoff, miembro de la Resistencia, cae en manos de la Gestapo, que le somete a torturas. El relato se desarrolla con un grato y convincente realismo, veraz, complejo y lleno de humanidad. Son escenas destacadas la recepción de los novatos en la Universidad, la compañía de soldados holandeses en bicicleta, la tortura de Guus, el sorteo de las misiones de Guus y Eric por Susan.

La música se inicia y concluye con el tema "Soldado de Orange", que incluye el motivo central de la cinta. Es destacable el tema dedicado a Esther, melodioso y romántico. Se añaden marchas militares y melodías diversas, festivas y trágicas. La fotografía opta por una estética realista y documentalista. El guión define bien a los personajes y destaca la complejidad de sus historias, salpicando las escenas de humor (sorteo tramposo). La interpretación de Hauer sobresale dentro de un conjunto equilibrado y convincente. La dirección crea la mejor obra de su etapa holandesa.

La película reclamó para el autor la atención de Hollywood.