La Línea Fronteriza Norte (NLL de sus siglas en inglés) es una línea imaginaria que separa los límites marítimos entre las dos Coreas en el mar Amarillo. Es una zona conflictiva y llena de tensiones que en ocasiones acaba en enfrentamientos directos. La película nos cuenta uno de esos enfrentamientos. Sorprende descubrir que en pleno siglo XXI haya sucedido (y suceda) algo así, puesto que en nuestro país los medios no dieron cuenta de la noticia, al menos que recuerde...

Durante la celebración del mundial de fútbol de Corea y Japón (junio 2002), las patrulleras surcoreanas que vigilan el Mar Amarillo y escoltan a los pescadores interceptan varios intentos de la armada norcoreana por sobrepasar la NLL. Finalmente, el día de la final de consolación entre Corea del Sur y Turquía, un barco de guerra norcoreano ataca a la patrullera 357.

La película comienza presentándonos tanto a los personajes principales como el escenario del conflicto con el mundial de fútbol como telón de fondo. Malos recuerdos de ese partido entre los anfitriones y España con uno de los peores arbitrajes que se recuerda, incluyendo la escena del fallo de Joaquín en la tanda de penaltys.


El 29 de junio de 2002, dos patrulleras dan aviso a un barco norcoreano de que ha rebasado la NLL como en tantas ocasiones anteriores. Esta vez el navía comunista no retrocede. En su lugar abre fuego contra la 357. Las escenas de combate entre los barcos dan muestra una vez más de la calidad del cine coreano para estas lides. Realismo, tensión, dramatismo y acción.

La cinta termina con escenas reales del funeral y declaraciones a cámara de los verdaderos supervivientes. En resumen, un título bien realizado que sin ser una gran película entretiene y nos descubre que la NLL es un lugar bastante peligroso.