Una mezcla de cine independiente con cine de género, y como siempre que se dan estas mezclas, sobre todo cuando el género es el terror, resulta un productor profundamente retorcido.
La mujer trata de una caníbal, que tiene la mala suerte de cruzarse con una familia disfuncional, regenteada por el patriarca, un psicópata, que es capaz de violar a su propia hija, convertir a su hijo en un discípulo y cómplice de sus perversiones, y golpear a su mujer hasta dejarla inconsciente.
La historia es un compendio de hechos tortuosos, morbosos, en algunos casos absurdo, y realmente hay que decir que cumple su cometido, que creo que es perturbar al espectador, no es el cine que me interese ver, la verdad que la vi de casualidad, pero estas provocaciones banales me resultan bastante tontas.