La premisa ya era genérica en su época, más de Hollywood incluso que de México, supongo que lo hicieron para competir con algo de su estilo y no les salió mal.
Si bien tiene los lugares comunes de las comedias románticas picarescas con toques de farsa, no es idiota ni hace ver a los personajes como si lo fuera. Diana que si bien atrae a los hombres ricos para entre ellos encontrar un candidato con el cuál casarse, estos son mucho menos estúpidos y caballeros de lo que ella pensaba, lo que me parece una buena reflexión y la vuelve bastante verosímil, no la típica película donde la mujer vuelve locos e imbéciles a todos los hombres que se le cruzan. Estos están calientes pero no tienen un pelo de boludos.
Me gustó mucho la historia con el tercer candidato, muy sarcástica. Por el contrario Ricardo que vendría a ser el príncipe perogrullo, es un cliché absoluto.
El final es predecible y moralizante como no podía ser menos, y la pareja protagónica les falta química sobre todo física.
Buen ritmo y dentro de su género simpática, ha envejecido bien.