Otro capítulo de los sucesos del anochecer, pero ya esta vez con sabor a protocolo trillado, Wan consigue crear la atmósfera explorando el miedo y su psicología en un experimento que no aburre en compañía de la oscuridad y su fenomenal técnica de montaje, digamos que ya propia, pero esta vez la conexión entre vivos y muertos se expande demasiado, busca explicaciones sobrenaturales y juega con el componente familiar, pero todo es un desorden a la hora de dosificar a los elementos, "Insidious 2" es algo más cercana al terror moderno.

Encuentra escenarios y asesinos del pasado y el presente, almas muertas y mensajes interiores, una lucha de poderes para sentir el mal en el hogar de las sombras, la madre de la muerte, la novia de negro, seguir una pista con tal de cerrar un círculo que no produce esas emociones del cine clásico de terror, es que no hay terror porque, exagerando un poco o bastante, juega a "Ghost" sin proporcionar nada novedoso, una verdad demasiado recreada sobre el más allá, acción de luchas cuerpo a cuerpo bastante mediocres, visiones de encuentros en otra dimensión desequilibradas para encima voltear la situación recuperando cuerpos, todo resulta inverosímil por estar muy alejada del mundo real.