Interesante film sueco, de principio de los setenta, cuando el asunto del sexo comenzaba en el cine a tomar aspectos didácticos, alejados por completo del cine pornográfico.
Sin ser un estudio pormenorizado de la sexualidad compulsiva de una joven, sí que se expresan ideas que invitan a la reflexión tras el visionado del film.
Las relaciones entre los jóvenes y sus mayores, el poder del sexo para relacionarse con el desconocido prójimo, y el encuentro del primer amor verdadero, alejado de todo egoísmo.
Todo ello expuesto de forma clara por Torgny Wickman, y con dos espléndidos jóvenes protagonistas, Christina Lindberg, excelente tanto físicamente como en la expresión de sus sentimientos más íntimos, y del hoy súperconocido actor internacionalmente, Stellan Skargärd.