Seguimos descubriendo pequeñas joyitas dentro de la filmografía desconocida de actores que me interesan, en este caso, el magnífico e infravalorado Beau Bridges, hermano mayor del enorme Jeff, que nos regala aquí una gran actuación como el partero del pueblo, el doctor de campo que ayudó a dar a luz a las famosas quintillizas Dionne en un pequeño pueblo rural de Ontario, Canadá.

La historia está basada en hechos reales y nos muestra el calvario sufrido por estas niñas, las primeras quintillizas naturales que lograron sobrevivir a pesar de las dificultades económicas y sociales en las que vivían allá por los años 30 en una Canadá de mayoría anglosajona que no miraba con buenos ojos a los ciudadanos de origen francés y religión católica como era el caso de la familia Dionne.

Es increíble cómo el médico que dio a luz a las niñas y el estado canadiense les quitaron a sus padres cualquier derecho a criar y formar parte de las vidas de estas niñas que fueron encerradas en un hospital y mostradas a la ciudadanía como monos de feria durante prácticamente toda su infancia.

Junto a Beau Bridges contamos aquí con unos actores francocanadienses más que correctos. Por un lado, el guapo Roy Dupuis y por otro lado la guapa Céline Bonnier. Ambos iniciarían una relación sentimental a raíz de esta película que dura hasta la fecha y nos entregan aquí sendas actuaciones como los padres de las quintillizas. Destacar también el correcto trabajo de la siempre interesante Kate Nelligan.
Merece la pena.
Un saludo,
Tess