Blitz es el seudónimo de un asesino de policías. El asesino es un hombre vengativo cuyo personaje rápidamente le reconoceremos en aquel otro asesino, Scorpio, que Harry el Sucio persiguió. El sargento Brant, Statham, es aquí el que se tomará el trabajo de atrapar al asesino como algo personal. Este personaje es fácil de reconocer pues Statham se ha quedado con la marca de hombre duro, desafiante y solitario que da un resultado idóneo para lo que se pide. No obstante, han querido dotarle con la cualidad de compañero fiable, sus compañeros recurren a él como si fuera buen consejero cuando sabemos que sus consejos serán siempre demasiado expeditivos, y que él en realidad, es un personaje un poco borde, pero es el único que te acompañará a emborracharte en los momentos duros de tu vida; o sea, un tipo duro pero fiable para todo aquel que necesite en algún momento un amigo.

Los demás personajes intervienen en la película como el conjunto que formaría una comisaría en una serie de televisión del género, alguno con la trayectoria suficiente y otros incompletos del todo, como el policía que sale con la agente negra. Tampoco se puede evitar tener la sensación de existir un leve aire aleatorio en el desarrollo de la acción, pero Blitz sigue adelante. Blitz hay que tomársela como se toma el periódico The Sun este asunto: En plan sensacionalista.

Por lo demás, el asesino de policías es admisible, se le repudia, y los minutos de acción son auténticos. Son los genuinos marca Statham, y el manejo de la historia va a su cuerda con la suficiente efectividad como para concluir en un entretenido duelo.