FA
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Voto de Teresa:
8
7,4
12.650
Terror. Thriller. Drama
Carol Ledoux es una bella y reprimida joven belga que vive con su hermana Helen en un apartamento de Londres. Carol experimenta sentimientos simultáneos y contradictorios de atracción y repulsión hacia los hombres; por eso para ella resulta tan incómoda la relación que mantiene su hermana con un hombre casado. Cuando la pareja se marcha de vacaciones, Carol comienza a tener alucinaciones y su mente se desquicia. (FILMAFFINITY)
4 de marzo de 2020
7 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Corría el año 1965 y un poco conocido –todavía- Polánski presentaba en el Festival de Cannes la primera de su «trilogía del apartamento», a la que seguirían La Semilla del Diablo y Le Locataire, a cada cual más loca y angustiante. Ésta se alzó con el Oso de Plata y fue el primer metraje de Polánski grabado en inglés. Ahora es considerada una de sus mejores películas (yo prefiero La Semilla del Diablo, pero lo que no tiene discusión, es que excepto algún patinaje como Basado en Hechos Reales, este hombre lo que es cine, lo hace muy bien). La protagonista indiscutible del filme es una de esas bellezas frías y distantes como la de Catherine Deneuve (Belle Jour, Indochina); Luis Buñuel dijo de ella «es bella como la muerte, seductora como el pecado y fría como la virtud»; ella lleva el peso durante las dos horas, haciendo de Carol y ayudada por la banda sonora –que pone de los nervios al más tranquilo de los hombres-, las llamadas de teléfono, las campanas del convento, la gotita de agua, las moscas, el timbre de la casa… aliñado con unas imágenes claustrofóbicas y –nunca mejor dicho- repulsivas (que comentaré en spoiler). Pero los secundarios, a pesar de aparecer poco y decir menos lo hacen de diez; la hermana, Helen (Yvonne Furneaux) que no se entera de nada –o que es tan egoísta que si lo ve, le da igual-, el amante de ésta, Michael (Ian Hendry, actor conocido por la serie de los años 60, Los Vengadores), que es el único que comenta desde el principio que igual Carol necesita un médico; luego está un muy atractivo Colin (John Fraser), que quiere una cita con Carol, ya veremos después cómo transcurre la historia; y otro interesante será el casero, interpretado por Patrick Wymark. Muchos personajes que envuelven a la protagonista pero muy fríamente.
Terror psicológico, una atmósfera agobiante, atrapante y que pensábamos que sólo lograría en la historia del cine el otro maestro del suspenso…ya sabéis, Hitchcock, pero Polánski estudió bien el tema también.
SPOILER por falta de espacio:
Carol es una mujer preciosa y tímida que trabaja en un salón de belleza haciendo la manicura; vive con su hermana Helen en un piso alquilado; Helen lleva un tiempo viéndose con su amante Michael y ya en los primeros minutos se muestran imágenes de la repulsión que le causa a Carol encontrarse cosas de Michael en el lavabo, recriminándole a Helen este hecho en cuanto Michael sale por la puerta.
Terror psicológico, una atmósfera agobiante, atrapante y que pensábamos que sólo lograría en la historia del cine el otro maestro del suspenso…ya sabéis, Hitchcock, pero Polánski estudió bien el tema también.
SPOILER por falta de espacio:
Carol es una mujer preciosa y tímida que trabaja en un salón de belleza haciendo la manicura; vive con su hermana Helen en un piso alquilado; Helen lleva un tiempo viéndose con su amante Michael y ya en los primeros minutos se muestran imágenes de la repulsión que le causa a Carol encontrarse cosas de Michael en el lavabo, recriminándole a Helen este hecho en cuanto Michael sale por la puerta.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
A todo esto, Michael es el único que piensa desde el principio que a Carol le pasa algo, que es muy tímida, que parece que le da asco sólo mirarle y que su comportamiento no es muy normal, a lo que Helen no le da ninguna importancia. Cuando aparece Colin en escena la incomodidad de Carol va en aumento, a pesar de que él se muestra educado, simpático, bien vestido y lo más importante, respetándola en todo momento. Al final consigue la cita, pero nunca se llevará a cabo. Colin empezará a sufrir por los desplantes de una Carol que cada vez está más alejada de la realidad. En medio de esta historia, Helen se va a ir a Italia con su amante, pero Carol le suplica que no se vaya, aunque no le sirve de nada. Mientras, el teléfono no deja de sonar, ora por la mujer de Michael ora por el casero, al que todavía no han pagado el alquiler del mes. Carol sufre pesadillas y alucinaciones mientras su hermana y Michael están en casa manteniendo relaciones sexuales. Cuando llega el día en que se marchan los amantes, Helen le deja un sobre a Carol para que pague al casero, pero en este punto la pobre Carol está más lejos de la realidad (lo que llamamos despersonalización) y va cometiendo una locura detrás de otra. Colin se la encuentra sentada en un banco de la calle mirando una grieta del suelo y la lleva a casa, se besan, pero Carol de repente consciente de lo que está haciendo se marcha a su piso. El apartamento cada vez está más sucio, a las patatas les sale raíces y Carol saca un conejo que no cenaron para hacerlo, pero se le olvida y entonces, según van pasando los días casi podemos olerlo desde nuestras casas, y mientras las moscas vuelan, y sólo las escuchas a ellas. Carol tiene cada noche peores alucinaciones…parece que un hombre la ataca mientras ella duerme, se escuchan pasos fuera de la habitación, ella, en algún momento, ha colocado un armario para tapar la puerta y que no pueda volver a entrar. El lugar cada vez es más horrible, ella ha corrido las cortinas y no entra la luz. El teléfono suena continuamente; es Colin, preocupado. Al final decide llamar al piso, pero nadie le abre, así que cuando consigue subir se da cuenta de que Carol está dentro y tira la puerta; mientras Colin muestra su preocupación, una vecina, típica de Polánski, les mira desde el descansillo, sin decidir si bajar al perro o quedarse toda la vida mirando. Aprovechando que la vecina se anima a coger el ascensor y que Colin se acerca a cerrar la puerta como puede, Carol le da un golpe en la nuca a Colin, matándolo y dejándonos con cara de… ¡oh no, Colin no! Ayudada por la alfombra lleva su cadáver hasta la bañera, que a todo esto se ha dejado el grifo abierto, inundando todo el piso. Allí se queda el pobre Colin. Carol se va a dormir. Al día siguiente el casero llama por teléfono, Carol, asustada, corta el cable, por lo que el propietario se tiene que personar. Nadie le abre cuando llama y cuando va a meter su llave se da cuenta que la puerta está forzada y entra. Se encuentra a una Carol en shock, que esconde una navaja de afeitar detrás –por si acaso-; él al principio está enfadado, pero Carol es muy guapa, muy joven y está sola, así que le termina ofreciendo un trato…acostarse con él y le perdona el alquiler. El final es el mismo que para Colin, pero éste merecido. Ya es el día en el que vuelve Helen con Michael; al llegar y ver la situación creen que Carol pueda estar muerta también, pero Michael la levanta, la mira de arriba abajo con ojos lujuriosos y Polánski nos acerca la cámara, al fin, para que podamos ver la foto de familia de Helen y Carol con sus padres. La mirada de Carol a su padre lo dice todo.
Muy buena.
Muy buena.