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España España · ciudadano del mundo (palencia)
Voto de kafka:
10
Drama Alvin Straight (Richard Farnsworth) es un achacoso anciano que vive en Iowa con una hija discapacitada (Sissy Spacek). Además de sufrir un enfisema y pérdida de visión, tiene graves problemas de cadera que casi le impiden permanecer de pie. Cuando recibe la noticia de que su hermano Lyle (Stanton), con el que está enemistado desde hace diez años, ha sufrido un infarto, a pesar de su precario estado de salud, decide ir a verlo a ... [+]
17 de agosto de 2006
260 de 297 usuarios han encontrado esta crítica útil
La historia real de Alvin Straight, un anciano de 73 años, que decide recorrer en su pequeña segadora los más de 400 kilómetros que le separan de su hermano enfermo, con quien no se habla desde hace diez años.
Con semejante y apabullante sencillez, David Lynch logra una obra maestra indiscutible, un film literalmente maravilloso y perfecto, que además no tiene absolutamente nada que ver con su cine previo (a veces brillante, otras irregular, siempre regado por una atmósfera perversa, malsana, inquietante), lo que la hacen ser todavía más, una obra de arte para la Historia del Cine.
"The Straight Story" es una impagable, conmovedora, profunda pausa en la prisa alocada que nos circunda; una grandiosa pequeñez en la absurda e inservible grandiosidad que nos rodea; una enorme gota de agua entre el desierto de falsedades y cosas prescindibles de este mundo; un huracán de lo que es la vida, el perdón, el orgullo, la personalidad, el sentido final de vivir y existir, la sensación de haber vivido.
Con una puesta en escena verdaderamente maravillosa, de un clasicismo torrencial y perfecto con el que Lynch se consagra eternamente, y un guión soberano, sensacional, de Mary Sweeny y John Roach, hay 2 elementos que la hacen ser definitivamente imprescindible: la extraordinaria, serenísim, grandiosa interpretación minimalista de un Richard Farsworth en estado de gracia; y la emocionante, memorable música de Angelo Badalamenti.
Son las dos guindas a una obra maestra, a una obra de arte, a un regalo para poder seguir abriendo los ojos y mirando, sintiendo, auscultando nuestra vida, nuestros corazones. Gracias, David.
kafka
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