El regreso al cine de Lina Morgan, por obra y gracia (o desgracia) del inefable y nefasto la más de las veces Pedro Masó, director oportunista dónde los haya, productor interesado a más no poder. La película (por decir algo) no es sino un engendro con algún rato gracioso a cargo de la diva y su acompañante (Rosario García Ortega), con un copioso arropamiento en un reparto muy generoso.
La cosa va de monjas metidas en líos con la policía, siendo un cruce inenarrable entre "Sor Citröen" (film simpático y apreciable), "Hostal Royal Manzanares" (exitazo de serie; producto bien mediocre), "Canción de cuna" (mil versiones ya hechas sobre ella), "Sister Act" (americanada monjil sin gracia) y "¡Vaya par de gemelas!" (gran éxito "morganil"). Ahí queda eso. Supongo que films como este también serán propios de incluirlos en una de las mentiras del cine español, pues la película no debiéramos considerarla solo para incondicionales de la respetable y más que currante Lina (de ahí el 3), sino como un "film válido" e injustamente obviado por la crítica. Al estilo de la infravalorada carrera de Mariano Ozores, vamos. En serio, por ahí los hay con estos pensamientos. ¡País!.