Esta película utiliza sin ningún pudor una experiencia llena de valor humano y de heroísmo, para hacer dinero deteniéndose en el tema de la antropofagía. Largas escenas de un personaje cortando restos humanos con la habilidad de un carnicero experimentado son la muestra de lo que se propone el director: Impresionar, dar asco.
El rigor histórico es mínimo. Las actuaciones son mediocres. El casting es muy malo.
La historia recordará esta película, hay que decirlo, por ser la primera que abordó el tema.

Y si hablamos de un cuento de Edgar Allan Poe, nos referimos a una historia que es garantía de misterio del bueno.
Habría que ser un pésimo realizador para arruinarlo y Mike Flanagan no lo es. Tampoco brilla. La producción y el elenco en mi opinión daban para más.
Y, de lo que no tengo dudas, es que la duración final resulta exagerada en términos de minutos. Si el propósito era dividir el cuento en 8, se hubiera podido recurrir a una duración de media hora, tal vez 40 minutos por capítulo.
Yendo a lo positivo: El cuento termina siendo respetado y la consecuencia de ese respeto es una serie con suspenso del bueno, aunque al principio resulte difícil de descifrar.
Hay una atmósfera apropiada, se logra contar historias paralelas sin que se caigan del tronco de la película, se conserva el ritmo en prácticamente todo el desarrollo y por fin, los detalles están muy cuidados.
Recomendable con pequeños reparos.
Mi puntaje 3 y 1/2 sobre 5.

Pet Sematary: Bloodlines
Después de la original (1989) (hoy considerada película de culto por los fanáticos del género) vino una remake (1992) que fracasó con total éxito.
En 2019 sobre llovido, mojado, una tercera película y un segundo fiasco. Todo parecía haber terminado ahí.
Pero la tozudez de Lindsey Beer lo llevó a escribir y dirigir "Pet Sematary: Bloodlines". Incluyó figuras como David Duchovny, si, el Mulder de los Archivos X) y Henry Thomas (el niño ET hoy en La caída de la casa Usher) y se tiró a la piscina.
Olvidó llenarla y la película se destruye al caer en el fondo seco de un intento frustrante.
Mi puntaje: 1 sobre 5

La película aborda un tema delicado y lo hace con discreción.
Denuncia el "mirar para otro lado" desde los lugares de poder (institutos de enseñanza, fuerzas públicas,etc.) y desde la gente de a pie que opta por el "no te metas".
Aparecen personajes valientes que se preocupan y se ocupan del problema, sin hacer de ellos héroes al estilo Hollywood.
También se mete con las inexplicables reacciones de figuras como la materna y la de una especie de padrastro que niegan la realidad de la boca para afuera.
Hasta ahí está todo bien (hay que sumarle los muy buenos actores que protagonizan). Pero es entonces que aparece Miguel Angel Rocca y casi consigue arruinarlo todo dirigiendo como si fuera su propio enemigo. Es muy difícil conseguir que Alberto de Mendoza no esté sólido en un protagónico.Lo mismo pasa con Malena Solda, que es capaz de representar mucho mejor a su personaje de lo que lo hace en este caso.
Se salvan Belloso y Briski porque supongo que no le deben haber hecho demasiado caso a Rocca.
Aún así, supongo que vale la pena ver "La mala verdad".

Sin ser demasiado ambiciosa, tiene propósitos claros en su guión.
Ville Virtanen sostiene su personaje con mucho talento y carga con gran parte del peso del film.
A veces puede ser un tanto críptica, es cierto, y tal vez ese sea su punto flaco ya que si claves importantes para entender la historia se alejan de la comprensión de la mayoría, podemos hablar de estar caminando sobre una cuerda floja.
En resúmen, está lograda lo suficiente para darle un BIEN más que un REGULAR.
Mi puntuación: 2 y 1/2 sobre 5.