No me explico cómo han podido invertir dinero en semejante cúmulo de despropósitos. Historia mil veces vista, trata de convencernos que un espía de la NSA vestido de Indiana Jones pero un completo ignorante en cuanto a arqueología (así nos lo hace ver el secundario árabe-guapo) soluciona los problemas a base de golpes, tanto de puño como de suerte. El argumento carece de sentido, los diálogos son dignos de una serie de TV alemana de medio pelo, los personajes se toman demasiado en serio, excepto el secundario árabe-gracioso, que es simplemente patético (igual con el doblaje perdió la poca gracia que tenía).Los actores son malos (guapos pero malos, Joane Kelly hace lo que puede pero con esos mimbres poco se puede hacer).
Tal vez algunas de las cosas que echo en falta en el filme son debidas a que es la tercera de una trilogía, pero cualquiera se atreve a ver las dos anteriores después de esta pseudo película hecha con pocos medios y menos luces.
En fin, mi consejo, si te la encuentras en la tele como me sucedió a mí, no pierdas el tiempo y cambia auque sea a la tele tienda. Seguro tiene un argumento más emocionante.

No sé qué tiene el trabajo de este tío que nunca me convence, pero acabo viendo sus pelis hasta el final. Esta no es tan lenta como acoustumbran a ser las que dirige, y reconozco que tiene algunos giros argumentales curiososos.
Si la hubiese visto en el cine hubiese maldecido el dinero malgastado, pero como ha sido gratis en la tele pública, pues está entretenidilla.
Para pasar un rato de intriga (de miedo nada, por muy sobrenatural que sea el planteamiento), si no le pides más.
Lo mejor:
Que no se hace larga.
Lo peor:
Al protagonista, el poli, no me lo creo. Los de dentro del ascensor no están mál, pero el resto o no saben actuar o están mal dirigidos, pero parecen desganados.

Sin prácticamente efectos especiales, no logra ningún efecto . Ni el demonio, ni las muertes impresionan. Si no eres capaz de asustar con las actuaciones, al menos pon un par de tomas terroríficas, hombre.

En conclusión, una peli que se deja ver y poco más.

El título de la crítica es una frase atribuída al propio Pablo VI. Y ese es el problema principal del telefilm. Aquí los curas son los buenos, pero tan buenos, que en un contexto como el de la segunda guerra mundial, se pasa de puntillas por los hechos vergonzosos cometidos por la curia, y sin embargo , se hace hincapié en las acciones valerosas. Sn embargo, no sé si a propósito o no, salen a relucir cosas como la manipulación política del voto de los feligreses como una estrategia aceptada y usada por la iglesia católica, o el ansia de controlar más que la vida espiritual del pueblo.
Aunque es un filme del 2008, tiene un aire sesentero tanto en el color como en las tomas, no sé si estará hecho a propósito.
La película se deja ver, no es aburrida, para tratarse de la vida de , pero el tufillo propagandístico es tan persistente que la hace solo recomendable para los muy católicos, los muy fans, o los que se aburren mucho un domingo por la mañana, como fue mi caso.

Esta es, con diferencia, la peor película que he visto en el cine en toda mi vida. Es un fiasco total encabezado por un Owen Wilson en un estado de desgracia permanente. El guión trata de oscilar entre la comedia y algo más serio, consiguiendo que ni te rías ni entres en la historia.
Deplorable. Es una película aburrida, deslabazada, una miserable pérdida de tiempo.
No quiero dedicarle más tiempo ni siquiera para criticarla. .

He pillado esta peli recién empezada en un canal de TDT, y no tenía ni idea del argumento. He seguido viéndola porque se notaba bien hecha, y el actor principal lo hacía muy bien. Luego he descubierto que era Tim Roth y que la dirigió Coppola.
Sin embargo, es una película rara. Habría que verla unas cuantas veces y posiblemente leer unos cuantos libros para poder apreciar todo lo que tiene esta obra dentro.
El argumento es enrevesado, hay constantes referencias "culturetas", diálogos (¿o deberíamos decir monólogos?) e imágenes extrañas, invertidas, confusas... y sin embargo la peli es chula, se deja ver, y acabas con la sensación de haber visto algo realmente interesante.
Supongo que Coppola es Coppola, y este tío haría arte hasta de un anuncio de suavizante. El caso es que recomiendo verla cuando tengas el cuerpo para rollos metafísicos.