Definitivamente interesante, comedia del absurdo e inmersa en una maraña de situaciones surrealistas de las cuales no escapa ni siquiera Nietszche. Con una notable honradez del desnudo, íntegro y tal cual y sin necesidad de llegar al morbo. Es para ver dos veces y recrear lo que se nos ha quedado perdido en aquel viaje de ilustraciones oníricas, donde el sueño de vernos desnudos ante los demás, de ver desaparecer nuestra ropa y de vagar sin ella, o con muy poca, realza y recrea nuestra peor pesadilla frente a un auditorio esperando oír a Mozart. Definitivamente interesante para el análisis psicológico y filosófico.

Es una película para niños, pero sorprendentemente reflexiva y con un trasfondo filosófico que la hace muy apropiada para trabajar en un curso de Filosofía para Niños/as. Más allá de las cuestiones técnicas, la película llega a ser apreciada por grandes y chicos por su perspectiva refexiva y por sus valoraciones existenciales y filosóficas, tanto que encontraremos a una niña con el nombre de Hipatia, filósofa griega, interviniendo en ese mundo reflexivo.

Vale la pena por toda la añoranza y la vitalidad mostrada en los personajes. Por supuesto, será necesario ser conocedor de aquella época que rememora, por lo que a la juventud probablemente no llegue. El aspecto técnico, así como la edición y la trama, están hechas para ese propósito mencionado, discreto pero logrado. A fin de cuentas, nos traslada y, para mí, ya eso es suficiente.