Ayer por la noche, nada más llegar del cine, hice una critica sobre esta película, pero he decidido cambiarla.
Volví pensando que había sido muy lenta, que sí, que por lo demás era perfecta, pero que se hacía muy larga.
Pero esta mañana me he despertado y seguía pensando en la película, tenía el ritmo de la banda sonora incrustado en el cerebro, la cadencia de las imágenes en los ojos. Y es que quizá el ritmo de la película sea así de lento para colarse en tu interior.
Es increíble lo precisa que es la fotografía, y lo acertados que son los primeros planos.
Es una película que mejora cuando la terminas de asimilar.
Realmente, Saoirse Ronan sobresale entre todos los demás. Incluso más que la propia Keira Knightley, que pasa a ser una mera excusa para desarrollar la historia, aunque hace una interpretación de las más brillantes de toda su carrera.
Es una película indispensable, y su banda sonora es obligatoria para cualquier melómano.

Esta película es brillante por muchas razones. Ya no es sólo la historia que cuenta, su argumento, las interpretaciones (sorprendente Robert Pattinson, nunca creí que me fuera a gustar) y su ritmo, es la moraleja que queda después.
No hace ni un mes que estuve en Nueva York, y debo reconocer que ví esta película por los carteles que ví allí, y la curiosidad de reconocer algún escenario. Pero me ha tocado en lo más profundo, en gran medida por lo reciente que es mi estancia en NYC.
Es una película que trata sobre la vida, sobre lo que es la vida y las vueltas que da. Historias así suceden. Lo ví en el WTC Memorial. Miles de vidas truncadas. Esa desazón que te deja el enorme agujero que antes fueron las Torres Gemelas, donde parece que se inspiró Marcelo Zarvo para componer la banda sonora, es lo que le da el ritmo a la película. Mientras la ves solo puedes pensar en lo complicada que es la vida, lo difícil que es conseguir saber quién eres y qué es lo correcto.
Me ha sorprendido muchísimo la película. Es profunda. A veces lenta, es cierto, pero la intensidad de la banda sonora consigue evitar el aburrimiento. La fotografía es maravillosa, y el ritmo de los planos, los movimientos de cámara, su propio ritmo visual. Y el final.
El final es la sorpresa con la que no cuentas, aunque desde el comienzo de la película lo tienes en la mente. El final es lo que termina de darle fuerza a la historia, si es que en algún momento no te parece lo bastante intensa.

Me he reido bastante al leer las críticas previas. No lo he podido evitar. Se dividen en dos secciones: a los que les gusta muchísimo y los que la detestan profundamente.
Yo soy de las que se han leido toda la saga, y vamos, aviso a navegantes, a los que esta película les haya parecido empalagosa, no vayáis al resto...serán mucho peor!!
Vamos a decir algo positivo, el guión está realmente bien ajustado al libro, es más, se trata de un resumen del libro, porque no han cambiado nada. Ni qué decir tiene que la banda sonora es inmensa, y que la fotografía ha mejorado mucho (aunque si antes era muy gris, ahora es muy amarilla...).
El resto ya no va a ser tan amable. Las interpretaciones son peores que malas. Kristen Stewart NO sabe interpretar, tiene la misma cara de alcachofa confundida desde Crepúsculo, y si tiene que llorar, grita y gime. Con Taylor Lautner, seré buena con él, disfruté de las vistas, aunque como actor lo veo algo limitado, y Robert Pattinson, en fin, menos mal que no sale más. ¿Nadie les ha dicho que se supone que están sufriendo un terrible dolor emocional? Tienen unas caras de alelados durante toooda la película que "tela marinera".
Para ir acabando, los Vulturis sí que están bastante bien, y Dakota Fanning es tremenda, teniendo en cuenta el poco tiempo que está en pantalla.
Por lo demás, sólo decir que está película no me ha sorprendido nada. Fui a ver una película de diálogos insulsos y caras aburridas, y justo eso fue lo que ví. Ni mejor ni peor que Crepúsculo, sólo otro elemento más de la saga.
Importante, la banda sonora...Es demasiado buena para esta película.

¿Qué ha pasado con la historia de Sexo en Nueva York? Yo he seguido la serie desde el principio, me encanta la simpatía y gracia con que tratan los temas más frívolos. Pero estas películas (e incluyo la primera) son un insulto al espirítu de la serie.
Se han quedado con la carcasa de la serie, que además fue una adición de la última temporada, la moda. Ambas películas son un desfile de ropa carísima, historias vacías y tiempo perdido. No aportan nada nuevo ni dejan ninguna sensación, aparte del aburrimiento más completo.
Además. en esta secuela encima desaparece uno de los personajes con más fuerza, Miranda prácticamente no tiene ningún peso en la película.
Una completa decepción.

Ésta pelicula en 3D ha sidi mi regalo de cumpleaños, y he de reconocer que me ha encantado. Ahora, no es la gran pelicula ni la gran historia que están intentado vender.
Es la historia de siempre (con pinceladas novedosas, he de reconocer), con planos más que predecibles (se sabe a los 20 minutos de película cómo va a ir la historia) y en sí no aporta nada novedoso, al menos, a nivel de guión.
El universo de Pandora, la belleza y poesía de la cultura nativa de Pandora, la crítica directa a la economía salvaje y la llamada al uso racional de los recursos naturales son sus puntos fuertes. En esta línea, destacar que ha sido estrenada en un buen contexto histórico teniendo en cuenta el fracaso histórico de Copenaghe.
Pero todo esto queda en un segundo o tercer plano transcurrida la mitad de la pelicula, momento en que se vuelve la historia de amor de siempre, con el típico malo malísimo.
Lo que no se puede negar es el gran espectaculo visual al que se va a someter el espectador. Los colores, las formas, los píxeles, es todo un prodigio de la era de la informática que sin duda asombrarán a todos. Pero no nos dejemos impresionar por lo obvio, la historia es la misma de siempre.