Por lo general, cuando se espera algo con ansia y, tras una larga espera llega el momento de la verdad, es fácil que las espectativas creadas diluyan o nublen el resultado final. Pues bien, ni mucho menos pasa esto con Juego de Tronos, la espera ha sido dolorosa, sí, pero de verdad que ha valido la pena. Literalmente, la HBO hace homenaje al género: ¡Hace magia!

No quiero asustar a los que no estén familiarizados con la Fantasía, es más, ni siquiera yo me considero un fiel seguidor del género. Decir que Juego de Tronos es una novela (serie en este caso) de Fantasía es como decir que La Biblia está basada en hechos reales. Que cada cual saque sus propias conclusiones e interpretaciones. Para mí sería injusto encasillarla dentro del género. Esto es más bien un drama histórico, una cruda y humana lucha de poderes. La Fantasía en este caso sería el valor añadido, el ingrediente que sobrealimenta la historia haciéndola aún más, si cabe, dramática y sorpresiva.

La serie es una dignísima adaptación de la novela homónima de George R.R. Martin. La profundidad de los personajes, el guión, las localizaciones, la fotografía, la música... Todo está mimado al detalle para deleite de todos, para los nuevos espectadores y para los más fieles lectores. Disfrutad de la obra porque la HBO ha vuelto a hacer una joya entrañable e inteligente. No quiero lanzar campanas al vuelo porque ya me conozco este mundillo y se lo injusto que puede llegar a ser con algunas series de excelente calidad, pero con un poco de suerte tendremos Juego de Tronos para muchos años, crucemos los dedos.

Larga vida a la HBO!

Larga vida a George!

¿Es Aronofsky el director con más talento del cine actual?
Con esto no quiero decir que sea el mejor ni el más efectivo, pero sí que es probablemente el cineasta que más destreza tiene detrás de las camaras.

El Cisne Negro es un buen ejemplo de lo que quiero decir. Ayer tuve la oportunidad de ver el film y he de decir que me pasé más de la mitad de la película con la piel de gallina, sobrecogido por la intensidad de las imágenes, la belleza de los planos, la tensión de las escenas. Salí del cine terriblemente emocionado, sudado, encantado, asustado... ¿Quien dijo que el ballet fuese aburrido?

No sería justo elogiar únicamente a Darren por la película. Natalie Portman se funde literalmente en su papel, ni siquiera podría decir si realmente está actuando, si Nina es Natalie o Natalie es Nina. No sería descabellado vaticinar que va a ser la próxima actriz con estatuilla.

¡Gracias Darren!, ¡gracias Natalie!

Sergio C. Martínez

El otro día la mandarina de mi bolsillo escapó y se coló en un avión sin alas donde, por capricho del destino, viajaba Mary Poppins acompañada de un perro llamado Garfield. La mandarina miró a Mary, Mary miró a la mandarina; Garfield ladró, o maulló, no sé... Y el avión despegó.

De repente surgió el amor y apareció Harry Potter que, de un plumazo, convirtió a Mary en un neumático inanimado, sin vida, muerto. La mandarina lloró sin que nadie pudiese consolarla, pues era difícil asimilar que el amor de su vida fuese ahora un simple trozo de caucho.

Garfield, con buenas intenciones, se acercó a abrazar a la mandarina pero, en un ataque de hambre repentino, comenzó a lamer desesperadamente las sabrosas lágrimas, sabor a zumo de melocotón, que derramaba la desconsolada mandarina. Y así surgió de nuevo la chispa del amor, un amor que duró para siempre. El avión se estrelló minutos después.

...

Pues señores, lo mismo pasa con la película.

Seamos claros desde el principio: NO ES PIXAR

No lo digo en el sentido evidente ya que la peli no es fruto de la factoría Pixar. Lo digo por otro motivo y, aunque quizás solo sea uno, no permite que comparemos a Rango con las grandes de Pixar. Me explico:

- Gran diseño y elaborados personajes.
- Divertida en todo momento.
- Visualmente perfecta. Gran fotografía.
- Apabullante sonido.
- Enriquecida al más puro estilo Western.
- Transfondo moral.
- Está acompañada por una gran Banda Sonora del siempre correcto Hans Zimmer. (Hace homenaje a grandes clásicos del cine)

Pero insisto, no es Pixar

Le falta ese punto, ese sello que haría que Rango estuviese entre Up, Wall·e o Toy Story 3. Esa sensación de levantarme de la butaca con la certeza de haber visto una joya.

No se cual es exactamente el "ingrediente Pixar" pero se lo que Rango NO consigue: EMOCIONAR

A estos señores deberían explicarles que cuando algo es perfecto, el más mínimo retoque o cambio salta a la vista en forma de CAGADA!
Un acto de irresponsabilidad. Con la cantidad de hambre que hay en el mundo y ver como Hollywood gasta el dinero en estas cosas. Demencial.

Y si lo que querían era hacer un homenaje al clásico y sacar dinero, ¿por qué no reestrenaron la original en cines?