La introducción a la serie es sorprendente mente agresiva, directa, fresca. Te venden algo nuevo, lo nunca visto, una serie interactiva que se sale de la pantalla, pero todo esto se desmorona en seguida.

El guión es MUY flojo, original, pero totalmente incoherente, se queda en pura fachada.

Entiendo que la intención de los creadores de la serie es una crítica a las redes sociales y cómo estas interfieren y protagonizan nuestra vida diaria, de manera que, para resaltar este aspecto, dotan a los personajes de plasticidad y superficialidad. Sin embargo, se les va de las manos, obteniendo personajes irreales y cuyas motivaciones carecen totalmente de sentido. Se nota que había una intención mucho más profunda que no han conseguido sacar a flote, y menos con un reparto de tan poco peso. Abundan escenas de drama patético que no llevan a ninguna parte y que en más de una ocasión me han hecho sentir vergüenza ajena.

En conclusión, es una serie que no aporta nada, no la recomiendo en absoluto. Pero si estás muy aburrido puedes deleitarte con una buena fotografía de famosas calles y locales de Madrid.