Pocas veces he recordado en una película de suspense un arranque tan interesante y una caida hacia el aburrimiento previsible, tan repentino.
A ver, si buscaba comedia, pues sinceramente, no lo encontré. ¿Suspense? en fin, no es spoiler decir, que el personaje protagonista lo desvela él mismo en el primer tercio de película.
Así que nada. Estuve esperando algún giro de guión y créame que el argumento tiene aristas suficientes para subtramas complejas y esperanzadoras frente al sopor que sospechaba crecientemente, inundaría la película.
Elegante un rato. Interpretaciones teatrales al estilo Agatha Cristie (en el mejor sentido de la acepción). Aburrida, pues sí y mucho. Decepcionante final...pues también.

Puro humor. Si tienes prejuicios de cualquier tipo, como dice él, tendrás ver un especial de comedia woke. No te divertirás, pero saldrás con la conciencia inmaculada y superior moralmente.
El repaso que hace a la sociedad actual (he leído en alguna crítica que es material antiguo...la envidia o el desconocimiento puede llevar a escribir eso) es interesante. Analiza con un bisturí de precisión los conceptos arraigados en cada uno de nosotros y rasga los puntos para que se nos vean las costuras hilvanadas y sin ninguna base intelectual.
Acabó con una gran sonrisa en mi cara y unos cuantos interrogantes en mi cabeza.
Gracias Ricky.

Nunca se podrá volver a hacer una serie igual. Tiempos muertos llenos de inteligencia, imposibles de justificar narrativamente en la actualidad. Personajes secundarios con historias llenas de ternura, comicidad y ajustables a unas tramas que sólo se entienden en Cicely, otro personaje en sí mismo. Todo unido en un equilibrio de lógica interna que se desvanece como chispa que se escapa de la hoguera si algo desapareciese.
Producción que se creó en el momento exacto y encontró al público perfecto. Diez.

Posiblemente la película más veraz, creíble y honesta de las que he visto, y puedo afirmar que son muchas. Redonda, sin ningún pero. Un ritmo fílmico que es increíble en un tema tan profundo. No hay escena ni siquiera plano que sobre, sea artificial o pretencioso.
Las interpretaciones son simplemente ajustadas a la historia, no es que sean buenas, es que no me las puedo imaginar ni peores ni mejores, son simplemente como deben ser y eso es muy difícil de encontrar.
Te olvidas del guión, de la dirección, de las interpretaciones de todo excepto de cómo te cuentan la historia.
Veánla.

Al salir de la sala el comentario más repetido y prácticamente único era el de: "es una película de Woody Allen, es tan de Allen". Y eso es bueno, no te defrauda. Aunque honestamente me gusta más el Woody Allen divertido, algo gamberro y sarcástico, no tanto el de comedia romántica, pero es tan Allen que no me importó.
Tiene el guión, situaciones continuas para estar sonriendo desde el principio, (la pareja de jóvenes actores me gustó mucho). Tiene, el guión, también algún giro inesperado, no demasiados, pero sobre todo tiene un poso de melancolía bien llevada, que da el testigo a nuevas generaciones que me hizo disfrutar.
Storaro siempre me ha encantado, pero aquí pasa desapercibido, fotografía N.Y. como siempre ha sido el punto de vista de Woody, un Nueva York otoñal que hace querer sacar el próximo billete de avión para ir a perderte por central park. Y eso dice mucho de un director de fotografía. Genial como siempre Vittorio.
Y si podeís verla en V.O., mejor, os lo recomiendo. No me gusta nada la voz escogida para la actriz Selena Gomez, me sacaba continuamente de la película y llegué a no querer al personaje por ello.
Allen 100%