Tan solo por el hecho de juntar a Peter Lorre,Boris Karloff y Bela Lugosi en la misma película debería ser suficiente para que merezca ser vista; y la verdad es que entretiene, porque es una película de los años cuarenta en EEUU hecha para ser visionada en los años cuarenta y, a pesar de lo que pueda parecer, en la actualidad te teletransporta un poco a esa época tan diferente en todos los aspectos.

Una serie que se desarrolla en Texas con todo lo que ello implica como un pausado ritmo sureño, buena música, coches clásicos y mucho polvo, no se escatima en ambientación. El guión si bien es simple no deja de ser entretenido y los personajes están bien trabajados. Los protagonistas son grandes perdedores que siguen buscando un golpe de suerte, cada uno a su manera, que implica más o menos nobleza, esto último os lo aclarará Christina Hendricks. Los antagonistas son realmente unos cabrones con pintas, lo que nos posiciona del lado de los buenos, como en los más puros westerns.

La película empieza excesivamente lenta pero mejora con el tiempo de visionado.Si bien es cierto que los primeros 30 minutos mientras el protagonista lleva todo el peso solo no me han faltado ganas de darle al stop posteriormente al película gana en interés sin perder esa estética poética que aburre tanto al empezar pero que luego, con más actores encaja de una manera que me ha parecido elegante. La recomendaría a cualquier persona que le guste el cine fantástico pero con la coletilla de que hay que aguantar al principio lo mejor que se pueda.

No acaba de ser una película de humor ni de terror sino una mezcla de ambas que ha quedado muy digna, con guiños al cine clásico y unos cuantos gags simpáticos la cinta se hace lo suficientemente entretenida como para pasar por alto los agujeros que tiene el guión en algunos puntos. A ver que no es una película de Bergman ya lo sabemos todos antes de verla pero es que no lo intenta y la sinceridad que desprende la simpleza del guión acompañado de la fotografía del pueblo gallego y el pazo y hasta el Opel Astra hacen de ella una película entrañable después de haber visto tantas películas americanas de este tema que no superan en nada a esta.

Aquellos que habeis leído alguna vez a Lovecraft podreis confirmar que la intención del director está en la dirección correcta. Al menos logra que nos asomemos a las puertas del oscuro mundo lovecraftiano pero no acaba de concretarlo, no consigue plasmar totalmente las sensaciones de desamparo y desesperanza que se consiguen al leer al autor.
Mi opinión del motivo por el cual no logra alcanzar su objetivo son, primero las mediocres actuaciones. Segundo los malos efectos especiales, y cabe una mención especial para la rata que da bastante risa en vez de temor. Y tercero y lo más importante los ambientes están muy poco logrados.
De todas formas le doy un aprobado porque me encanta el autor y el director Stuart Gordon no me parece muy desencaminado, aunque debería de esperarse bastante más de él.