Matt Reeves vuelve a pisar terrenos salvajes con La guerra del planeta de los simios, el broche final de una trilogía de ciencia ficción que ha inundado salas durante los últimos años, y que sin lugar a dudas es una grandísima elección para darse un buen chapuzón de entretenimiento en nuestros calurosos veranos.

Vivimos en un espacio tiempo donde el bombardeo de Remakes y Reebots es constante, lástima que el mayor porcentaje de ellos resultan ser de baja calidad. Mat Reeves se adueña de un producto saturado hasta la saciedad y logra convertirlo en una aventura apocalíptica, aportando frescura al mundo de la ciencia ficción y aventuras.

Al igual que su predecesora, esta entrega cuenta con grandes dosis de acción y entretenimiento. De hecho, la escena de apertura es una muestra de ello, una de las mejores escenas de toda la cinta. La película avanza con pie firme mostrando la realidad de un planeta en el cual la venganza y la tiranía están a la orden del día. Es de agradecer que Matt Reeves haya querido mimar su fábula, y es que a nivel técnico el film es mucho más que notable, contando con unas cuantas escenas y detalles que sin duda harán que te encojas en la butaca, dejándonos con hambre de más.

Las actuaciones están bastante correctas, a destacar la actuación de Cesar (Andy Serkis) que una vez más vuelve a sorprendernos llevando sobre su espalda prácticamente todo el peso de la película. Los efectos de animación de todos los simios están dotados de un gran nivel de realismo superando aun con creces a sus dos anteriores películas. También a destacar al brutal coronel interpretado por el gran Woody Harrelson. La fotografía también está a un gran nivel, que sumada a la música hará que viajemos junto a Cesar y sus simios por esos paisajes apocalípticos en busca de la venganza.

La película tiene una ligera esencia de western, lo que la hace algo más interesante de ver, además de contar con unas pocas y curiosas referencias a otros grandes títulos, como lo es “Apocalypse Now” o “Centauros del desierto”.

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El problema llega a mitad de película, cuando a Matt Reeves, en vez de empezar a atar cabos, se le empieza a ir de las manos. No logra que la conjunción de todos los términos termine por ser totalmente natural, esto partirá la película en dos partes, y con ello que el último tercio de la película sea bastante forzoso y tenga que buscar soluciones rápidas, dejando para el final una epicidad propia del producto pero incompleta, más pobre de lo que debería ser. Y es aquí donde tenía que haber dado más, pero por el contrario, Matt Reeves da menos.

Teniendo en cuenta todo ello, podríamos decir que “La Guerra del Planeta de los Simios” no es solo una fábula revestida de blockbuster veraniego, sino también una alegoría sobre la dificultad de vivir en paz, sobre el odio y todas sus raíces, una historia de supervivencia y superación. ¿Acaso nosotros los seres humanos, nos diferenciamos mucho de los animales? Esta es la pregunta que constantemente rondara tu cabeza, pues Reeves nos resuelve la duda en la misma película, la respuesta es no… Cualquier ser vivo bajo presión o moviéndose por venganza será capaz de cualquier cosa.

En resumidas cuentas, “La Guerra del Planeta de los Simios” es una buena película, con un alto valor de entretenimiento y técnico, que pudo haber dado más de lo que ha dado, por querer buscar soluciones rápidas y forzadas. Lo que está claro es que gustará tanto a la mayoría de los fanáticos de este universo como a los que simplemente busquen entretenimiento.

Crítica realizada para Fotograma Rojo.

Mis críticas las cuento con los dedos de una mano... como las películas o productos televisivos que me quitan la respiración. Gomorra lo hace, lo hace de tal manera que no te das cuenta, y cuando llega al clímax final estas tan metido que te ronda en la cabeza una pregunta...
¿Como he llegado vivo hasta aquí? Puesto que desde el inicio eres uno mas del clan Savastano.
A lo largo de la serie odiaras a sus protagonistas, les desearas la muerte o desearas que sobrevivan. Aquí no hay punto medio, es fría, violenta, dura y realista, al espectador le invade la excelente factura visual de la serie y ya no puede bajarse... Es mucho mas que una historia del libro Gomorra de Roberto Saviano, es la historia de un distrito cuya rutina se ve inundada por las drogas y las balas. Un distrito que esta bajo el poder de personas sin escrúpulos que ansían ascender y ser recompensados como es debido, y así conservar el imperio económico y la reputación que les precede.
No voy a decir más salvo que la vean, y que la vean las veces que haga falta...
Como consejo (obligatorio) verla en versión original.

Ha tardado 35 años en llegar a los cines la secuela de Blade Runner, aquella cinta de culto basada en la novela de Philip K. Dick. Ridley Scott fue el encargado de adaptar ese mundo al cine tan solo 3 años después del estreno de “Alien: el octavo pasajero”. Esta vez el director de orquesta es Denis Villeneuve, que durante los últimos años se ha hecho un hueco importante entre los directores mejor valorados. Lejos de convencionalismos, sus películas siempre ofrecen mucho más que lo mostrado en pantalla, ya que resulta muy reconfortante que el autor plasme en el film parte de su estética personal.

El argumento de “Blade Runner 2049″ nos transporta 30 años después de los hechos acaecidos en la primera película. En esta ocasión un nuevo Runner ”K” descubrirá un secreto que pondrá en duda y peligro su existencia.

La cinta cuenta con un elenco de actores de gran renombre, entre ellos tenemos a Ryan Gosling, que va en línea ascendente, a Jared Leto que hace bien su papel, Ana de Armas que a mi parecer consigue dar un gran salto en esta película, aun con las limitaciones de su papel y a Harrison Ford entre otros.

Cuando hablamos de Blade Runner, se nos viene a la cabeza la imagen de un futuro distópico plagado de luces de neón envuelto en una atmósfera muy ”noir”. “Blade Runner 2049” resulta ser la hermana pequeña de dicha película, superándola en algunos aspectos como puede ser el apartado técnico. Denis Villeneuve consigue captar la atención de los espectadores gracias a una memorable fotografía y una gama de colores muy bien seleccionada. La fuerza y crudeza de las imágenes son el punto fuerte del film.

El guion, comparado con la primera parte, resulta ser más plano, acaba por ser uno de los puntos en los que la película ha bajado el nivel; Denis Villeneuve intenta avivar la historia en el tramo final con algún giro que se queda carente de emoción. Hans Zimmer y Benjamin Wallfisch son los encargados de componer la banda sonora. Una banda sonora que a mi gusto podría haber sido mucho más épica y podría haber tenido un mejor uso, pues en algunos tramos del film resulta un poco estridente.

Una historia cocinada a fuego lento en la cual el amor, la vida y muerte, la existencia del ser humano se conjugan entre escenarios lúgubres para dar resultado a una secuela de gran nivel que hipnotizará a los incondicionales y no defraudará a los espectadores. No busques acción trepidante y busca elegancia, la cual “Blade Runner 2049” está sobrada de ello.



Crítica realizada para Fotograma Rojo.

Me encanta el cine, por lo tanto, me encanta esta película. Te toca el corazón, te lo sobrecoge y juega con él, después de verla varias veces, me doy cuenta de que cada vez que la veo me gusta más, la película para mí esta dividida en dos partes, la primera con un ritmo más pausado, profundo y emocional que la segunda, el ritmo de la segunda parte es sobrecogedor, oscuro y brillante, pero las dos partes contienen la esencia del séptimo arte, cuidando cada detalle presente en cada plano, acertando con la música, todo ello seguido de unas grandes interpretaciones. La película no es apta para todo tipo de público, por que puedes esperar otra cosa, debido a su sinopsis.

Este film llego a mí gracias a una persona a la cual le había parecido aburrida y lenta, a eso es a lo que me quiero referir con el anterior párrafo, pero a mí me ha enganchado y golpeado hasta el final del film, para gustos los colores.

totalmente aconsejable.

La película nos muestra dos lados opuestos, por un lado el capitán Phillips y su tripulación y por el otro lado a los piratas somalíes cuyo "capitán" es Muse (Barkhad Abdi).
Paul Grengrass no quiere justificar a los piratas en este film pero a medida que avanza la película te vas dando cuenta de que los dos protagonistas hacen su trabajo, uno traslada mercancías y el otro secuestra barcos bajo presión, siendo esta opción una de las pocas maneras de ganar dinero y para poder seguir vivo.
El instinto de supervivencia rebosa durante toda la película, dando lugar al juego del gato y el ratón en alta mar. La cautela e inteligencia del capitán Phillips contra la seguridad y muestras de superioridad de Muse.
La película no se desinfla debido a las numerosas escenas de acción y tensión, transformando un drama en un auténtico Thriller, las primeras escenas de persecución en alta mar son muy dignas de ver.
El verdadero corazón de la película sin duda alguna son las interpretaciones de los dos capitanes Phillips (Tom Hanks) y Muse (Barkhad Abdi).
La interpretación de Barkhad Abdi es insuperable, parece que estamos ante un verdadero pirata, por ello se ha llevado más reconocimiento y elogios que su enemigo de alta mar Tom Hanks, cuya interpretacion es de notable aún sin tener un dialogo con numerosas palabras.
El director profundiza en los personajes lo justo y necesario, centrándose mas en las tácticas y trampas del capitán para frustrar el ataque de los piratas.


Lo mejor: Las interpretaciones, la fotografía, las numerosas escenas de tensión que en ciertos momentos angustian y la escena final.
Lo peor: En el tramo final de la película en ciertas ocasiones nos da la sensación de estar acudiendo a un mitin político.