No soy un aficionado a la saga de Star Wars, pero sí he visto fragmentos grandes de varias películas, así que conozco más o menos a los personajes de los episodios IV a VI y su trama. De tal forma que entiendo la decepción de muchos al observar que se reutilizan elementos de la trama de la saga original en esta nueva trilogía. Tengo un gran problema con esta película, y es la falta de coherencia y continuidad respecto a sagas anteriores. Por un lado, si bien esto es fantasía, uno puede crear coherencia entre los elementos fantásticos sin mayor problema, sin importar que tan disparatados sean. Así pues, Wolverine con su adamantio será siempre vulnerable a magneto, Batman tuvo que entrenar mucho para ser el luchador contra el crimen que es, y los Skywalker tuvieron que tener un entrenamiento duro para ser Jedi. Aquí los poderes se desarrollan en un transcurso de horas, sin ninguna razón aparente.

Y por otro lado, uno esperaría encontrarse con un imperio débil o extinto, y con unos rebeldes consolidados y pertenecientes a una nueva república. Pero no, es como la primera peli.

La verdad no creía que iba a ver está película, pero al ver la calificación promedio me animé. No pasé un mal rato porque no me generé expectativas, pero esta película no es tan buena como la pintan.

Al principio la película parece explicar de forma precisa conceptos tales como dinero, deuda y economía en general, pero luego falla en explicar como la reserva federal y la banca de reserva fraccional de Estados Unidos funciona. A medida que se avanza, el documental se transforma en propaganda de teoría conspiratoria que raya con el antisemitismo.

Puntuación simbólica 0/10, pues este sitio no permite colocar ceros.