Como película una mierda absoluta, y como archivo visual sobre el juego, también lo es. Y si falla en los dos factores interesantes que puedan atraer al espectador, poco o nada, puede sorprender o enganchar la trama.

Puntos frágiles y débiles que hacen de esta película una vergüenza tanto para el juego, como documento o film, son: 1. Exageración exacerbada bañada en dramatismo estúpido e innecesario. 2. El dialogo llega a un nivel extremo de pobreza, centrándose únicamente en el juego como único e inamovible tema de discusión en todo el largometraje. 3. si no conoces el juego de Magic: The Gathering, vas a odiar todo lo que ofrece este pedazo de bazofia.

Lo único bueno (y muy difícilmente, deleitable) y que te pueda atrapar, para transcurrir al final, es: Las Cartas, ver como juegan y como trasciende un grupo de amigos que dejaron de jugar hace mucho tiempo, pero que regresan al ruedo. Aunque también hay clichés, tópicos y a veces inyectan la típica historia de amistad entre amigos. Perooooooooo....Elaboración, tanto mensaje: llanamente un desperdicio, que ni por asomo se ocuparía como referencia, más bien como un mal chiste que se ve por curiosidad, en vez de calidad.