Esperaba que esta película me causara más risa que llanto, y así es durante el comienzo y hasta casi la mitad. A partir de la mitad la cosa cambia.

El personaje que interpreta Adam Sandler es un arquitecto que se encuentra agobiado por la incapacidad de combinar su vida privada con su vida laboral y un buen día decide poner fin a su agobio. Sin saber cómo encuentra la solución en una tienda de camas , donde un "científico loco" le ofrece un mando a distancia universal recién fabricado que le va a solucionar la vida. Y al principio así parece ser, pero según transcurre la película, el mando toma el control de la vida de Sandler: cada vez que desea algo sin querer conscientemente el mando avanza en posición ultrarápida varios años hacia adelante, hasta que llega un momento en que Sandler ha visto perder toda su vida y a su familia.

Esta película sobre todo hace que valoremos la vida que tenemos, con los buenos y los malos momentos que nos ofrece, y especialmente no dejar nunca de lado a la familia, saber dedicar tiempo a lo que verdaderamente importa, porque muy a menudo dedicamos nuestra energía a cosas que, en realidad no son tan importantes para nosotros, desperdiciando oportunidades de disfrutar de las cosas que realmente nos hacen felices. Este es el objetivo de esta película: enseñar a la gente a valorar su vida y dar tiempo al tiempo no intentando acelerarlo, porque todo tiene su momento, tarde o temprano.

A pesar de todos los papeles que Angelina Jolie ha interpretado a lo largo de toda su carrera profesional, me atrevería a decir que este es el mejor que ha hecho, el papel de su vida, o al menos en el que más se aprecia su talento interpretativo. El personaje le queda como anillo al dedo, su interpretación es brillante-

En cuanto al resto de la película en sí misma es una obra de arte: decorados, efectos especiales, vestuario...todo invita a viajar a un mundo de fantasía y a la vez cruda realidad al mostrar a una Maléfica no tan mala como todos la imaginábamos, o al menos no como nos lo habían contado. Lejos del cuento de La Bella Durmiente que tenemos en mente cuando vamos a verla, esta película es sobre todo una lección de valores, de amor, de odio y de perdón. Rompe con la magia del cuento que nos contaron cuando éramos pequeños, pero en cambio introduce una nueva historia que desconocíamos, la de por qué Maléfica se convierte en un hada malvada, aunque después vuelve a surgir su bondad.

Sin duda una película digna de ver.

Más drámática que cómica, esta película argumenta la pura realidad que muchas parejas viven, y es más para llorar que para reír, sobre todo al final. A buen seguro que muchas chicas se sentirán identificadas con lo que siente el personaje que interpreta Jennifer Aniston: tener un novio o marido que no tiene en cuenta los sentimientos de su novia o esposa, y que la ayuda poco o nada en las tareas domésticas cuando ambos trabajan, que no tienen nada en común...
Todos estos motivos hacen que esta pareja acabe rompiendo su relación haciéndose aún más daño cuando ya lo han dejado, ella intentando darle celos haciéndole creer que sale con otros hombres, mientras él monta fiestas en la casa que todavía los dos siguen compartiendo.
Al final se comprueba que el respeto, la confianza y el entedimiento mutuo (especialmente por parte de él), no les hubiera hecho llegar a un punto tan crítico, y más teniendo en cuenta que se querían de verdad, después de la curiosa y absurda manera de conocerse.

Quería ver esta película sabiendo que me gustaría, y mis expectativas se han cubierto con creces, no sólo me ha gustado sino que me ha parecido excelente. Los decorados, los movimientos, gestos de los personajes y sus diálogos son realmente geniales, incluso parecen reales, hay momentos en que no se sabe si se está viendo una película de animación o una película con personajes de carne y hueso.

En principio puede parecer una película hecha para niños pero tiene bastantes puntos fuertes que a cualquier niño puede asustarle, de hecho al comienzo avisan que no está recomendada para niños menores de 7 años, pero yo la recomiendo a todo aquel que quiera disfrutar riendo y al mismo tiempo encogiéndose de emoción.

Comparto la opinión de otros usuarios al decir que se trata de la típica película que más que en una sala de cine, debería encontrarse en un videoclub para verla un domingo por la tarde en el salón de casa.
Es ciertamente entretenida al tratarse de una comedia romántica. Jennifer Aniston interpreta un papel de chica incomprendida por su familia, tanto que se cree adoptada, y durante toda la película intenta encontrar su verdadero origen.

En general una película para pasar el tiempo, ni buena ni mala, simplemente pasable.

PD. Mejor intepretación: Shirley McLaine, es una actriz de los pies a la cabeza.