No es un capitán del ejercito nazi, más bien está en contra de los nazis, pero es un patriótico alemán que ama su patria e intenta llegar a su país desde Sidney con su tripulación, pese a todas las dificultades que irán surgiendo en su propio buque mercante. A este viaje se les une una mujer que es una espía y en un principio contraria a las ideas del capitán. Este barco es perseguido por un amigo y contrincante británico al estallar en ese momento la II guerra mundial. Más aventuras que belicismo. Gran Wayne.

Buena pelicula de batalla naval, donde los personajes tienen más importancia en el guión, que la acción en si. Preminger se adentra más en los miedos, ambiciones, enfrentamientos entre los protagonistas.

Pasable cinta donde Foxx esta poco creíble en su papel de raterillo que se mete en un embrollo demasiado grande para él. No hay quién se crea lo que le pasa, un malo, muy malo hasta en la interpretación, al igual que el agente del FBI (Morse) encargado de todo este embrollo.

Sencillamente un film que te sujeta a la butaca escena por escena y te enseña que los militares no son todos como los americanos, duros, mal hablados, chulos sin miedo a nada, como muestran una gran mayoría de películas estadounidenses,desde la música maravillosa, puesta en escena agobiante donde en cualquier momento puede pasar algo y te manteniente con miedo a lo que pueda pasar, una fotografía espectacular, un guión prodigioso, ameno y con gran fuerza, escenas bélicas fantásticamente filmadas, personajes que solo quieren amar, que recuerdan a sus seres queridos, su camaradería, sus miedos, un poema antibelicista que te hace pensar lo absurdo del género humano donde todos pierden y que nadie gana.
Sencillamente una obra excepcional.

Típico western de forajidos que se han convertido al otro lado de la ley por culpa de unos malos, muy malos, pero poco listos y los fuera de la ley muy listos. Muchos tiros y poco argumento. Cuando empieza la película ya se sabe comó terminará.