Hay dos clases de personas en este mundo: las que ven las películas y series antes de opinar sobre ellas y las que se creen que habiendo visto alguna vez algo del mismo género, país o productora ya lo han visto todo y pueden opinar de lo que sea sin darle una oportunidad. Y es que es muy fácil decir: "Esa serie es como Los Serrano pero con policías", o "esa serie es una pastelada" dejándose guiar por la lamentable promoción que hacen la cadena y las revistas de la serie, promocionando sólo la historia de amor, que sin duda es la peor de las tramas.

Recomiendo a todos los que tengan una opinión negativa de "Los Hombres de Paco", que vean capítulos como "La Mentira", "El Código Vicente", "Cariño y metadona", "La traca final", "La ratonera", "El canuto de la verdad", "Lolito", "El efecto mascletá", "Vengo con tres heridas" o "Todos los planes de Lucas Fernández"... y me digan si no han pasado de la risa al llanto casi mágicamente (cosa impensable para mi hasta que vi esta serie), si no han tenido los nervios a flor de piel o si no se han maravillado con las actuaciones de Juan Diego, Paco Tous, Pepón Nieto, Federico Celada, Miguel de Lira, Neus Sanz, Carlos Santos o Asier Etxeandía, entre muchos otros.

A todos los incrédulos: "Los Hombres de Paco" no es como las demás, no es "Los Serrano" con policías, no es una telenovela de las que ponen en La 1 por las tardes, no es una mala copia de "24"... se ríe de todas ellas. Dadle una oportunidad, dos, tres... lo acabaréis entendiendo.

Tengo 21 años, he visto "Delfy" durante toda mi vida desde los dos años y me sigue gustando. Vale que la animación era un corta y pega del mismo plano de un personaje sobre los mismos fondos, pero lo bueno de esta serie estaba en los diálogos, en la banda sonora y en el doblaje. El gran Rafael Turia creó con su voz al mejor personaje malvado de una serie de dibujos animados que recuerdo: el Capitán Vinagre. Ninguna serie, salvo quizás "La Aldea del Arce", tiene la suerte de poder contar con un malo tan entrañable y simpático. Sus conversaciones con el resto de personajes eran siempre originales, divertidas e incluso con cierto toque adulto que yo por lo menos no llegué a entender hasta que fui más mayor, y eso me encantaba.

La serie alcanzó su momento de gloria en las tramas entre los capítulos 27 y 65, que fue cuando pasó a emitirse a Antena 3 y la serie dejó de ser tan infantil con temas como la competitividad, la magia o el bosque para pasar a tratar temas como el agujero de la Capa de Ozono, la caza de ballenas, la marea negra o la guerra. La pena es que desde el capítulo 66 al 91, con el que se cierra la serie, los dibujos y tramas son un refrito de los anteriores capítulos y ya nada es nuevo excepto el doblaje. D´Ocon se pasó un poco reciclando, pero aún así crearon una serie que recordaré toda mi vida.

Para mi, el Capitán Vinagre es mi fiel amigo.

La primera tenía un pase, la segunda era infumable, pero lo de esta película va más allá. Hace un par de semanas vi "La venganza de Ira Vamp" y me parece una obra maestra al lado de esta cosa sin guión pero con pectorales. Las absurdas conversaciones amorosas que llenan el 90% de la película dan ganas de vomitar, y hasta Dakota Fanning da pena. Sólo se salva el 10 o el 3% de acción restante, porque las coreografías están bastante bien, por eso le he puesto un 2/10

Aclaremos una cosa: la película no tiene argumento, ni si quiera parece que tenga nada que ver con la primera parte, o al menos eso me ha parecido (salvo los personajes), y eso es lo que la hace grande. Es como si viésemos 100 minutos de absurdos "flashbacks" de Padre de Familia seguidos, pero protagonizados por los mismos personajes. Si te gusta el humor escatológico y negro, es una carcajada tras otra sin descanso para ñoñerías ni pinceladas románticas. Muy recomendable, te ríes hasta con los niños, que en este tipo de películas suelen, por lo general, dar vergüenza ajena.

Tras el insulto que supuso la cuarta parte, llegó por sorpresa una quinta en el mismo fortmato de telefilm. Con Malcolm McDowell y el Hombre Cangrejo de "Me llamo Earl" como ladrones no podía ser tan mala. Está al nivel de la tercera y recuerda bastante a las dos primeras en algunos detalles como en que exista la figura de una personalidad misteriosa y fantasmal. Hay pocas trampas, que es lo divertido de esta saga, pero las que hay son originales, y los porrazos que se llevan los ladrones son bastante graciosos.