arrow

La torre de los siete jorobados (1944)

La torre de los siete jorobados
81 min.
7,0
4.087
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Disponible en:
Suscripción
Escena (Español)
Ver 2 más
Sinopsis
En el Madrid castizo de finales del siglo XIX, el enigmático fantasma del doctor Mantua revela al joven Basilio la existencia de una ciudad subterránea en la que habitan unos siniestros personajes dedicados a actividades criminales. Basilio consigue dar con la Torre de Los Siete Jorobados, en cuyo interior permanece secuestrada e hipnotizada Inés, la sobrina del difunto doctor... (FILMAFFINITY)
Género
Intriga Fantástico Terror Siglo XIX Fantasmas
Dirección
Reparto
Año / País:
/ España España
Título original:
La torre de los siete jorobados
Duración
81 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Links
8
La novela la escribió mi abuelo
Veo con tristeza que ninguna crítica contempla la verdadera historia de esa novela.

La comenzó Emilio Carrere pero engañó a su editor y tras cobrar el dinero acordado, se fue dejando unos cuantos folios escritos mezclados con hojas en blanco. El editor al descubrir el engaño buscó quién arreglara el desaguisado y ese fue mi abuelo, Jesús de Aragón Soldado, apodado "El Julio Verne español" que firmaba con el pseudónimo J. de Nogara (nuestro apellido al revés) o Capitán Sirius. Hablamos del año 1924. Visto el éxito obtenido, comenzó su carrera como autor de ciencia ficción y misterio.

La adaptación de Neville es muy buena y tras haber leído otros libros de mi abuelo (La Sombra Blanca de Casarás, De noche sobre la ciudad prohibida...), he visto en esta película su inconfundible estilo, entretenido, misterioso y muy ocurrente.

Una pena que ni en la caja que contiene el DVD ni en los títulos de crédito se mencione a mi abuelo para nada.
Mi agradecimiento al periodista Rodolfo Serrano, quién lo aclara todo en un artículo en quediario.com.

Me enorgullece ver unas críticas tan positivas y una puntuación media tan alta. Neville no hubiera podido obtener tan buen resultado de la adaptación de una mala novela.

Miro tu foto, tu mirada azul y bondadosa y te ubico en el Cielo, desde donde estas cosas nada importan, pero yo que aun estoy aquí, quiero echar una lanza a tu favor y aclarar cómo fue.
Va por ti, abuelo.
[Leer más +]
161 de 168 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
El tiempo en movimiento.
Una cupletista abre esta insólita historia, rodada con el fino sentido de comercial calidad de Neville, de fantasmas y ciudades subterráneas, de espectros y coches de caballos, de carreteras de polvo y sombreros de copa.

Un genial retrato de una época, de un fino costumbrismo solapado entre detalles y laberínticos expresionismos, camuflado en una historia fantástica de corte humilde pese a todo. El folletín, las localizaciones típicas madrileñas, un tono novelesco de misterio español, de personajes muy nuestros, de caracteres que nos son muy cercanos por su naturalidad, humor y hábitos (nunca los personajes cotillean tanto, se prestan tanto al comentario certero por la espalda, con esas ansias de confidencia justiciera, como en una película española). Todo ese ambiente proporciona una amena y extraña, para lo que nuestra filmografía suele ser, película, y nos invita a abandonarnos al regusto del tiempo, el que quiera hacerlo, al reflejo de los años retratados en celuloide quién sabe si con más o menos encanto que la propia realidad otorgó en su día.

Y es que esta película tiene una comicidad muy nuestra, un enfoque de historia de fantasmas de literatura juvenil de bisoña y sugestiva escasez. El sainete, los diálogos… Todo nos retrotrae a nosotros mismos o, mejor, a nuestros antepasados. A esas calles en las que vivieron, a esas calles en las que caminaron y a esas inocentes historias con las que rieron o se emocionaron. Esta cinta es tiempo, más que otra cosa, es un rato pensando en edificios de piedra, coches de caballos, enaguas, pololos, camisas de sarga, enormes portones de madera astillada y llaves de dos palmos… Y lo que todo aquello suponía. El cine siempre ha de tener algo de esto, como los buenos libros. Ha de obsequiarnos con un pedazo de nuestro propio viaje por los años y los siglos; que nos conecte, de alguna manera, con el camino de lo que fue, lo que es y será. El cine ha de ser desgarro y testimonio del tiempo que pasa, que no vuelve (Tiempo Perdido lo llamaron). Más allá de tramas, más allá de taquillas, es lo que queda.

Eso es cine. Lo demás son películas.
[Leer más +]
101 de 113 usuarios han encontrado esta crítica útil
Más información sobre La torre de los siete jorobados
Fichas más visitadas