Claudio y Elena son una pareja perfecta, enamorados, cómplices, con planes de futuro. Parece que su felicidad se verá completada con la llegada de su tercer hijo, pero todo se trunca cuando ella muere en el parto. Aunque trata de ocultarlo, la vida de Claudio se desmorona, no sabe afrontar la responsabilidad de criar a tres niños, de mantenerse a flote sin el que había sido su mayor apoyo.
Esta coyuntura sirve para que Claudio, y también nosotros, nos demos cuenta de que la familia y los verdaderos amigos siempre estarán ahí, a pesar de nuestros errores... y que, como canta Vasco Rossi, la vida continúa.

No es una película perfecta ya que, a mi parecer, en escasos 97 minutos se intenta contar demasiado, tratar demasiados temas que no acaban de encajar unos con otros. Además, nos encontramos con personajes apenas esbozados que podrían haber dado mucho juego, como los hermanos o vecinos de Claudio.
No obstante, si hay algo que sabemos a estas alturas es que el cine italiano sabe como tocar la fibra sin dramatismos, sin recrearse en el dolor ajeno, pero con eficacia. Siguiendo la estela de títulos como 'Anche libero va bene' o la más reciente 'Solo un padre', nos hace ver la dura labor a la que se enfrentan quienes, de un día para otro, se encuentran solos ante la mayor responsabilidad de sus vidas.

Por otro lado, inevitable mencionar también como “factor redentor” el cast capitaneado por Elio Germano ('Che ne sarà di noi', 'Io e Napoleone', 'Come Dio comanda'), que por fin ha visto reconocido su talento a nivel internacional con la Palma de Oro en el Festival de Cannes; repitiendo con Daniele Luchetti en la dirección tras la maravillosa 'Mio fratello è figlio unico' demuestra que forman un tándem perfecto. Eclipsados por él pero no por ello desdeñables encontramos a Isabella Ragonese ('Dieci inverni', 'Oggi sposi'), Raoul Bova ('Under the Tuscan sun', 'Scusa ma ti chiamo amore'), Stefania Montorsi ('I piccoli maestri') y un irreconocible y siempre sorprendente Luca Zingaretti ('A casa nostra', 'Sanguepazzo').


En fin, recomendable para todos los que disfruten de las historias sencillas y realistas, que quieran comprobar que, efectivamente, ese ex-aequo en Cannes estaba justificado... y que no sean muy exigentes con todo lo demás ;)