Una gran película, que nos muestra el mundo de las drogas, en especial se puede destacar en la película la presencia del niño (muy bien interpretado) que debido a la drogadicción de su madre se ve obligado a transformarse en un adulto (es el cabeza de familia) abandonando la inocencia conforme va transcurriendo la película. No llega a impactar tanto como otras películas que tratan este mismo tema como "requiem por un sueño" pero da una visión muy humana de este mundo, transformando a las personas con ese problema en lo que realmente son, seres humanos, que podrían ser cualquiera de nosotros. Muestra dos historias con las drogas, con dos finales muy diferentes, una la de la madre del niño y otra la de una camarera que conoce este, dos formas de vivir en este mundo. Como ya he dicho, en cuanto a los actores se puede destacar el niño que interpreta a la perfección su papel y como no a Keira Knightley que en películas como esta demuestra que es una gran actriz capaz de meterse en cualquier papel. A mi personalmente me ha gustado esta película y la recomiendo.