Gracias a la vorágine de estos últimos años en torno al “found footage” la figura del Bigfoot ha vuelto cobrar fuerza dentro del mundo del cine. Es un personaje dentro del imaginario popular norteamericano que se presta muy bien a este género del "metraje encontrado". Han surgido varios films en los dos últimos años, cuatro concretamente y casi todos mediocres, de los cuales tres pertenecen a este género y el otro es un telefilm que no merece la pena ni comentar. Me queda por ver uno, que no he tenido ocasión y del que leído bastantes cosas positivas, que no es otro que el “Willow Creek” de Bobcat Goldthwait rodado en 2013.
“Bigfoot County”, única película como director, del actor/director Stephon Stewart, y que desde luego debe de mejorar para seguir dirigiendo, porque aunque es mejor (por poco), que “Bigfoot: The Lost Coast Tapes”, también del mismo año y con similar temática y género, no deja de ser un producto flojito, pero que introduce algo que la hace diferente. Y es ese toque a lo “Deliverance” que el director añade a la historia y que no te esperas, pero que gira por completo el rumbo de la película, haciéndola realmente terrorifíca por unos instantes y que le ayuda a levantar ligeramente el vuelo al film. Aun así, como en la mayoría de films de este género, el manido, “found footage”, la película se resiente por los cuatro costados por una historia contada de forma bastante endeble.
Desconocidísimo reparto como en este tipo de films, pero en este aún más, ya que creo que entre todo el reparto no suman media docena de films.
A los que nos gusta el “found footage” la verán sin desagrado, al resto… a su juicio… ya que es muy posible que no entiendan como alguien puede perder el tiempo en este tipo de cosas...
Aunque yo me incluya entre ellos.