Mal western, convencional a más no poder, con un guión a veces ridículo, una acción a veces paupérrima y una dirección que quiere pero no puede.
Lo único salvable es el reparto con el bueno de Randolph Scott (que pese a no hacer su mejor película cumple con creces) y a la siempre competente Ruth Roman así como unos paisajes bastante decentes pero eso no es suficiente para un western blando y lleno de tópicos, un film convencional a más no poder.