La historia de una chica humilde que se presenta a un concurso musical no se caracteriza por su originalidad. Durante todo su metraje es previsible, hay mucho personaje secundario sin sustancia (los amigos, el guaperas, la rival…) y no brilla como un gran musical.
Como virtudes destacaría su buen gusto, que no emplee recursos fáciles narrativos dedicados al público adolescente y sobre todo el trabajo de sus dos protagonistas principales: Elle Fanning y Zlatko Buric. Ellos hacen que sus personajes sean creíbles y tengan vida. Quizá para resaltar esa relación el guion ha descuidado todo lo demás. Los mejores momentos los comento en el spoiler.
Elle Fanning canta muy bien desde pequeña. En esta película quizá sorprende más que se exprese en polaco, cuando conversa con su madre en la ficción, la actriz polaca Agnieszka Grochowska.
Violet es una chica de pueblo que vive en una isla de Inglaterra. Divide su tiempo ayudando a su madre en la granja de su propiedad, estudiando en el instituto y trabajando de camarera. Es tímida y no parece muy feliz. Aunque forma parte de un coro, también hace algunas escapadas a un bar, donde canta para una audiencia que no presta mucho interés. Su ilusión es la música, pero su madre, una persona práctica debido a sus apuros económicos, considera esa afición una pérdida de tiempo. Cuando surge la oportunidad de presentarse a un casting del famoso concurso Teen Spirit, decide hacerlo a escondidas de su madre. Solo tendrá el apoyo de un viejo alcohólico que una noche la aplaudió en el bar.