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España España · madrid
Voto de tiznao:
8
Comedia Un matrimonio de clase media seduce a todo tipo de vividores nocturnos para llevarlos a su apartamento. Una vez allí, con el propósito de librar al mundo de pervertidos y de resolver su situación económica, los asesinan... (FILMAFFINITY)
29 de junio de 2009
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Desopilante, acida y mordaz comedia negra dirigida y co escrita junto a Richard Blackburn (que también actúa en el papel del tipo de la inmobiliaria) y protagonizada por Paul Bartel como Paul, un dependiente de una tienda de vinos, casado con Mary (Mary Woronov), una nutricionista en una clínica de Los Ángeles, cuya mayor ilusión es aprovechar sus conocimientos para abrir un restaurante que llamarían “Paul and Mary's country kitchen”, pero la cosa esta complicada ya que andas cortos de dinero y a Paul le han despedido de la licorería en la que trabajaba.
En vista del vicio y la depravación de la sociedad que los rodea y tras contactar con Doris the Dominatrix (Susan Saiger), una dulce y amante mama cuya fuente de facturación proviene de su conversión en una dura dominatrix (sus escenas son de lo más divertidas del film) y tras un incidente con un depravado que se ha colado en su casa al que matan de un sartenazo, deciden poner un anuncio en una revista especializada en la que Mary se ofrece como una sádica ama, para matarlos, a continuación robarles el dinero y así juntar los 20.000 dólares para el soñado restaurante.
A partir de aquí, a través de los personajes que van conociendo (y en su mayoría asesinando a sartenazo limpio) y la entrada en escena de Raoul (magnifico y arrollador Robert Beltrán), un chicano con el que contactan, tras encontrar un folleto publicitario en el que se anuncia como cerrajero y al que Paul y Mary le encargan mejorar la seguridad del piso en el que conviven y llevan a cabo su particular actividad criminal, tenemos una magnifica comedia macabra, preñada de principio a fin de una mala leche y mordacidad apabullantes a la hora de retratar los usos y costumbres de la sociedad de la época, en la que tanto Paul Bartel como Mary Woronov (una de las mejores actuaciones de la arrebatadoramente sensual modelo y musa de Warhol) realizan un excelente trabajo y junto con Robert Beltran y Susan Seiger son las estrellas de la función, encontrándonos además con (entre otros), Ed Begley Jr. en el papel del cliente hippie, Allan Rich (el fiscal de “Serpico” y secundario de lujo en múltiples producciones) como el cliente nazi, Charles B. Griffith (guionista de cabecera de Roger Corman, al cual le gustaba hacer pequeños cameos mas que a un tonto un lápiz) como uno de los asistentes de la fiesta del jacuzzi que es pisoteado por Doris the Dominatrix y el gran John Landis (otro que tal baila en el tema cameos) como el cliente del banco con el cual tropieza Mary cuando va a pedir un crédito.
Parece ser que en el año 2000 estaba prevista una secuela con Paul Bartel y Mary Woronov repitiendo papeles y con Chevy Chase como un tipo que descubría sus actividades y los chantajeaba, pero la prematura muerte de Bartel de un ataque al corazón dio al traste con el proyecto.
tiznao
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