Entretenido western, más bien de serie B, pese a tener dos estrellas como protagonistas, amén del gran Ward Bond.
Se pasa el rato pues la historia está bien dosificada en apenas 77 minutos, siendo amena en todo momento.
Pero tiene algunas rémoras, como su errático guión, a cargo de Niven Busch, no en vano pasa de una situación a otra sin mayor cohesión argumental. Cuando parece que la historia irá por un camino, rápidamente se pasa a otro escenario y anteriores personajes ya son pasado y aparece otra línea a seguir.
Esto desconcierta un tanto, pero se perdona al tener un buen ritmo y escenas de acción bien filmadas.
Es una pena que la cinta sea en blanco y negro pues los paisajes, agrestes, frondosos y rocosos, son impresionantes (Peppermint Falls, Sequoia National Forest, California, USA, entre otras localizaciones).
El final, un tanto rápido.
Y como curiosidad, comentar dos cosas, la primera que está rodado en el vetusto sistema del 3-D y que a los 43 minutos, aproximadamente aparece una leyenda en la pantalla que nos indica "intermission", es decir, descanso. ¿Estaría filmado para la televisión?

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