Mítica serie mexicana con la que muchos crecimos y nos hizo enamorarnos del teatro, aparte de meternos en la piel del personaje, haciéndonos reflexionar lo duro que es vivir sin padres y sin dinero. Una de las series más longevas de la televisión, la cual todavía sigue reponiendose y hasta han hecho una serie de dibujos animados ( El Chavo Animado ). Nos enseñaban valores como la amistad, la fraternidad, la colaboración, la empatía, ...Y, sobretodo, nos hacía reír. Resulta curioso ver como los niños, en la realidad, tenían más edad que los que hacían de padres ( Chico, en la vida real, es mayor que Doña Florinda ).

Destaco al personaje de Don Ramón, con el que se hacían muchos gags basados en las confusiones, sobretodo con Doña Florinda, de la cual siempre recibía una buena torta. Recomendada para que la vean los más pequeños de la casa, y así incitarles a que hagan teatro. Un 8'5. Tal vez la nota media de la serie sea tan baja debido a la duración que tuvo, ya que al cabo del tiempo se hace repetitivo y a veces repetían las historias pero en otro contexto diferente.