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España España · West Coast
Voto de Dabi:
3
Drama En junio de 1969, una serie de hechos desembocaron en violentos disturbios en el bar Stonewall Inn de Greenwich Village, frecuentado por gays y transexuales. Este fue el punto de partida de los movimientos que reivindican la igualdad de derechos de la población homosexual. (FILMAFFINITY)
25 de enero de 2016
21 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pretendamos por un momento que esta película no se llama "Stonewall". Digamos que se llama "Diario de un inadaptado" o alguna cosa así. En ese caso estaríamos hablando de una cinta mediocre, previsible, bastante maniquea, pero tampoco abismal. Las interpretaciones son decentes, algunos personajes están medianamente bien construidos, la banda sonora funciona, aunque el arco argumental es un copia-pega de otras decenas de "coming of age dramas" y no arriesga lo más mínimo. Los diálogos son inestables, a ratos ridículos, a ratos divertidos, a ratos ligeramente cargantes, a ratos medianamente interesantes. "Diario de un adaptado" sería un aprobado raspadito, siendo muy, muy generoso. Por desgracia, la película no es "Diario de un adaptado", sino "Stonewall". Y es aquí donde aparecen los problemas graves.

Haciendo una analogía, imaginad que "La lista de Schindler" trata sobre la vida de un militar nazi que no está muy contento con el régimen. Cuando faltan 20 minutos para que termine la película, el protagonista va a la fábrica de Oskar Schindler, le echa un vistazo a la lista y ve que está salvando cantidad de judíos, le felicita, se pira de la fábrica y no se vuelve a hablar del tema.

O que la película de "Salvador (Puig Antich)" estuviera protagonizada por un anarquista aleatorio llamado Octavio García, interpretado por un actor guaperas rollo Mario Casas o Hugo Silva. En la segunda mitad de la película, Octavio se tropieza con Salvador Puig Antich, comete un atraco con él, y después de eso se despide de él y a Salvador no se le vuelve a ver el pelo, pero en los créditos finales te cuentan su historia así de pasada.

O que "Pearl Harbor" fuera una película sobre un triángulo amoroso súper básico y que el verdadero ataque a Pearl Harbor estuviera plagado de invenciones comerciales y solo ocupara media hora de las tres que dura la pelíc... Ups.

Bueno, me habéis entendido. Esto es lo que pasa con "Stonewall", básicamente.

Para los que no hayáis oído hablar de él, el disturbio de Stonewall de 1969 fue la primera vez que el colectivo LGBT, harto de ser vilipendiado y humillado durante años, se enfrenta a la autoridad y sale ganando. Tras esa noche, nada volvería a ser igual. Se formarían frentes de liberación, alianzas activistas, y un año después se conmemoraría el evento con el primer desfile del orgullo gay de la historia, desfile que posteriormente se iría adoptando en otros países. Es, como he dicho antes, un evento fundamental en la lucha por la igualdad de la comunidad LGBT. Un evento que, en una película de 130 minutos llamada "Stonewall", se extiende durante diez, tal vez quince minutos, y no más.

Por si eso no fuera suficiente, casi todos los colectivos que realmente participaron quedan completamente ninguneados. ¿Las lesbianas? Olvidadas. ¿Los transexuales? Casi desaparecidos. ¿Los drag queens? Representados de forma secundaria por la figura de la activista Marsha P. Jonhson, uno de los escasos personajes reales que se retratan en la película, y que funciona casi exclusivamente como refuerzo cómico. De la implicación de la comunidad afroamericana gay se puede decir prácticamente lo mismo. El protagonista es un niño super mono, americano, rubiazo, el yerno perfecto, un chaval que no ha roto un plato en su vida. En la hora y media previa a los disturbios se nos cuenta su historia, su amistad con un grupo de chaperos de Greenwich Village, su romance con un tío que bla bla bla. De las consecuencias de los disturbios se dice poco, por no decir nada.

En resumen, el error garrafal que comete esta película es llamarse "Stonewall" y pretender que ese es su argumento cuando no te cuentan casi nada de los disturbios, y lo poco que sí te cuentan apenas tiene que ver con el evento real. Es una película sobre minorías que ignora a las minorías, que tergiversa la realidad, una película tremendamente falsa y preocupantemente conservadora, carente de rigor y de incisión. Es una lástima que una historia tan jugosa reciba un tratamiento tan descafeinado.

Puntuación: 3,9
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Dabi
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