El argumento de la película promete y mucho, resulta un guión muy apetecible y también bastante novedoso, porque, salvo en las películas del Viejo Oeste, o en los duelos que se planteaban en la época renacentista y posterior, se ven estas situaciones, no en este mitad de siglo XX, donde ese honor de las personas se defiende de otra manera.

Aquí nos encontramos con dos personas, de los más destacado de un pequeño pueblo, el maestro y el carnicero, que, nadie sabe por qué, se batirán en duelo a las 12 horas. Y aquí ya empieza el tedio y el aburrimiento cuando vemos cómo reaccionan las personas de dicho pueblo, que normalmente, aceptan a los dos y la desilusión más grande se muestra al final, en ese duelo patético del que no voy a dar detalle porque, el cómo termine, es lo único que esperas ya de esta película.

A mí, que la he cogido con cierto interés, me ha decepcionado, en su desarrollo, y todavía más en un final de traca. Le doy un 3.