Cuando Nintendo hizo su aparición en el mundo de los videojuegos domésticos se convirtió en el dueño del cotarro llegando a ser prácticamente un cacique, puesto que el dominio era incontestable...hasta que llegó Sega y con ellos la guerra "Sega vs Nintendo".

'Console Wars' es un documental sobre el principio, el desarrollo y el fin de esta guerra que llegó a ser cruel y cuyo ascenso de ambas marcas hizo que se empezase a hablar de videojuegos en diversos ámbitos e, incluso, en el ámbito político con sus discusiones de si los videojuegos eran el diablo, como se puede ver aquí y como estoy seguro que se seguirá pensando hoy en día determinadas personas. Este documental muestra que los videojuegos no solo no son el diablo, sino que han crecido hasta ser una industria más allá de rentable, que da puestos de trabajo y ha dado millones y millones y millones de horas de diversión a chavales, y no tan chavales, de todo el mundo.

Claro que no todo son flores y precisamente se muestra la guerra que llegaron a alcanzar las dos empresas por el dominio del sector de los videojuegos. Acompañado por testimonios de personas que han trabajado en ambas empresas y secuencias de animación al estilo de videojuegos que son útiles para no ser todo el metraje exclusivamente entrevistas, es el legado de una época que los más mayores (yo entré a finales de los 90 a este mundillo cuando tenía casi diez años) habrán vivido. Dos gigantes compitiendo entre sí mediante campañas publicitarias echando mierda al otro, consolas y juegos para ganar el nº1 y anécdotas e historias varias que para quien le guste la historia de los videojuegos lo encontrará bastante atractivo. Además que se apoya en bastante material de archivo y las ya citadas secuencias de animación que hacen más encantador este largometraje y, en definitiva, impulsa el saber, el objetivo básico de cualquier documental.

Aunque hoy día el "Nintendo vs Sega" se haya sustituido por el "Microsoft vs Sony", 'Console Wars' es una prueba de que hubo un día donde eran el ojito derecho de millones de personas y con su rivalidad ayudaron, indirectamente, a llevar a la industria del videojuego al próximo nivel.