Helena de Troya, un mito antiquísimo que, como casi todos los mitos griegos, a la hora de ser llevada al cine ha de sufrir algunos cambios y recortes para satisfacer el gusto a veces predecible y otras insospechado del público y la crítica. Quien espere ver la famosa guerra como protagonista en la trama es mejor avisarle: esta es una historia de amor, aunque también de pasiones, como bien es la guerra para muchos, y nunca se centra en ella del todo.
Los actores no son de los reconocidos por el gran público, y no puedo decir si son buenos o no (aunque Rufus Sewell pinta muy bien para el papel de villano), porque en lo personal la historia en sí misma pudo más en mí que ese análisis, es decir, ver el mito por fin en un filme, y para mejor, en uno que considero entre lo más fieles a la historia original, me fue más avasallador que el deseo de hacer una observación minuciosa de la película;a lo primero siguió lo segundo, y que puedo reafirmar que esta película es de las más adaptadas, de los que mejor siguen la historia de Helena tal cual se contó, y las de sus compañeros en la trama.
Aun así, es precisamente allí donde hay que hacer un alto y aclarar. En detalles, especialmente secundarios, es muchísimo más fiel que la Troya de Brad Pitt, mejor que ésta, no por capricho, sino por lógica: está mejor adaptada y no se rinde culto a la belleza de dicho actor a cada momento, sin hablar de que no cuenta con su desastroso y patético final. Pero, tal vez a modo de compensación, circunstancias centrales en por lo menos uno de los personajes principales(o principal de los secundarios) que determinan su conducta a lo largo de la historia no son para nada correspondientes a la leyenda, y es ahí donde se hallan los que para mí son los principales errores de la película. Para algunos tal vez sea decepcionante; para mí, y seguro para otros, el resto de la trama y la ambientación son un excelente premio consuelo por estas fallas.
Por último, la mitología en si misma: la epopeya partiendo desde sus orígenes, y siguiendo incluso hasta más allá de su final( El nacimiento y el célebre juicio de Paris, hasta una de las tantas consecuencias de las decisiones a raíz de la guerra al final) hacen honor a la frase "Dios está en los detalles". En ese aspecto, la película te deja con ganas de más, pero es muy dudoso que algún día un film ilustre la historia tal cual fue y no haga que el público la califique de pesada o risible. Sería difícil dar un papel a los muchos hijos del rey Príamo que aparecen durante la guerra, muchos de un total de 50, para que se hagan una idea...
Sienna Guillory tal vez no sea la gran cosa, pero ese cabello colorado, ese carisma, el destino y el título que le ha dado el papel logran hacerla mágica y una perfecta Helena de Troya, después de todo, ¿Dónde encontrar una actriz que a decir ver eclipse a TODOS los hombres?

¡Ay!¡Como duele saber que ya no volverán a verse estas telenovelas! No desmiento que haya sido uno más de tantos culebrones, uno nuevamente estelarizado con la presencia de Thalia, pero allí es donde encuentro justamente la magia del asunto, en este último punto. La historia era prácticamente un clon de María la del barrio o de Marimar pero Thalia lo arreglaba todo con su belleza y su voz, haciendo agradablemente pasables todas esas viejas y reconocidas situaciones de novela con final feliz comprado antes de que el rodaje empezara siquiera. Pero, fuera de mi ya obvia admiración por ella, la novela tenía también lo suyo propio, aunque fuera en pequeña medida, como la familia que te quiere y te apoyará siempre y la madre mala dispuesta a todo para que no le saquen a su "bebe" de veinte y tantos años. Altamente recomendable para fans de la cantante y aceptable para los quieran algo para pasar el rato.

En verdad les digo, maravillosa. Buenísimas actuaciones por parte de Bridget Fonda y Jennifer Jason Leigh, especialmente de ésta última que logra generar emoción( incluso de identificación ) en el espectador. Gran filme para ver un sábado a la noche, solo o acompañado. Da para pensar entre las relaciones entre las personas, el miedo, la soledad y la culpa.
Un 10 para Jennifer Jason Leigh, en verdad cautivante en todo sentido en este filme.

Esta película es para mí un excelente recuerdo. Estaba en el 2008 y era mi último año de secundaria. Salí de la escuela, la alquilé (en VHS ), titulada aquí "Donde duerme el horror", y la vi con las persianas bajas. No era de noche, ¡Pero como me concentré! Reconozco que el argumento falla a veces y deja interrogantes, así como la ambientación no es muy variada, pero el filme atrapa, uno quiere saber que es lo que pasa. Por otra parte, se percibe en el aire ese olor a los años 80 que desprenden las películas y la música de esa época, haciendo que viajes al pasado y ames el VHS. El estremecimiento es peculiar y lo ensalza el que los efectos no sean digitales, computarizados al 100%, y que no se trate de hacerte vomitar las tripas con escenas en exceso sangrientas. Por último digo que el innombrable es creíble, se siente real y tocable y no una mísera animación de juego de computadora. A mí me encantó, pero los que deciden su opinión son obviamente ustedes. Eso sí, si buscan algo como "Inframundo", se equivocaron de sitio.