La profundidad que la soundtrack de Vangelis logra otorgar a esta película, es pocas veces experimentada en el cine. El director japonés, combinado con el compositor griego, componen una mezcla genial y poco convencional. La película "pega"... obviamente, a aquellos allegados a la basuras de Roland Emmerich o Michael Bay (la masa crítica, bah), esta peli les pasará de largo. Se que existe una remake hollywood de esta cinta, pero ni me he gastado en verla ni pienso hacerlo, sabiendo que es una profanaciòn de la historia real que aquí se relata.
Resulta bastante indignante ver que no hay siquiera UNA crítica de esta cinta, ya convertida en cinta de culto. Nada más resta verla, cualquier crítica se queda corta. Recomendada, aunque los amantes de los animales puedan pasar un muy mal rato al verla.

Película Enorme. Malick, Zimmer, el abanico completo de actores, todos brillan, dando lo mejor de sí. Obligada para los que están hartos de tanta basura de cuerpo, mente y alma cotidiana, los resarcirá sin dudas.

The Wall es pura genialidad, entendiendo por genialidad al acto de recrear una obra brillante con pocos recursos. Es una sinergia de talentos creativos con la genialidad musical de Pink Floyd como núcleo. Respecto al título de mi crítica, alguien tenía que decirlo, y es que no puedo soportar que se desprestigie esta obra por pseudocríticos que no son más que los mismos que han apedreado a los genios y profetas a lo largo de la historia amamantados por un establishment podrido hasta las raíces. No está de más mencionar que ese establishment es el que se lleva el principal palo esgrimido por el profeta moderno de Waters con su particular narrativa.
Especialmente recomendado lavarse bien las orejas antes de su visionado.

Vaya combo!.. entre Aronofsky, Mansell, Connelly y Burstyn... BURSTYN!.. Apenas he visto a esta veterana actriz aquí y en El Exorcista, y puedo asegurar que esas dos actuaciones valen por 1000!..
Aronofsky hace un brutal despilfarro de recursos cinematográficos, a cuál de todos ellos más efectivo, y por si fuera poco, ahorrándose sentimentalismos baratos y sin pisar en lugares comúnes de lágrima fácil, se da el lujo de plasmar una historia brutal con destellos de comicidad e ironía. Lo sorprendente es que a pesar de los toques de humor grotesco, la historia no deja de ser, valga la redundancia, BRUTAL.
No puedo evitar pensar qué hubiera sido del espectador si se hubiera contado esta historia sin esos toques de humor grotesco, a modo de bofetadas cortas pero potentes. Seguramente muchos hubieran tenido problemas para continuar su visionado. Qué decir de las pinceladas sonoras de Clint Mansell, sin las cuales me cuesta imaginar un producto final similar... bueno, no sé, no hay nada más que pueda aportar que no otorge ver esta joyita... Toda una lección de edición, y por sobre todo, de CINE.

El abuelo George lo ha vuelto a hacer... Padre indiscutible de la "Wasteland" (Junto con Gibson) y pardino del nuevo Hardy-Rocatansky, se ha dejado llevar por su propio vórtice autorreferencial (con total autoridad), y nos ha regalado este "despelote" audio-visual... el cual he tenido que pausar y rebobinar en reiteradas ocasiones dado lo frenético de sus puntos álgidos, generosos en fotogramas que son auténticas salvajadas marca registrada del abuelo George.

Fury Road es una auténtica gozada del género y un flipante orgasmo para el sub-género post-apocalíptico que tanto ha dado de comer a dignos y no tan dignos sucesores.

La única falencia, si cabe, es su versión 3D, la cual resta más que sumar, aportando confusión a una de por sí caótica concatenación de fotogramas, los cuales a mi entender, merecen ser vistos de plano y en mero 2D para hacerle justicia.