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Voto de telemendenge:
1
Western Un desertor negro del ejército unionista y un amerindio se enfrentan al reto de sobrevivir en el desierto de México haciendo frente a las amenazas racistas y a los cazarrecompensas. (FILMAFFINITY)
3 de agosto de 2017
3 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
La he grabado de la tele y gracias a eso la he podido mandar a paseo sin terminar de verla, a coste muy reducido. Empieza con el negro corriendo por el desierto hasta que te aburre. Se para un momentito para comer un cacho de carroña que disputa a dos perros y sigue corriendo. Le doy p'alante hasta que se para el fugitivo porque hay un tipo (un indio veremos luego) tumbado en la arena. Se abalanza sigiloso sobre el indio y amenazándole con un cuchillo le tapa la boca para que no grite. Pero si... ¡¡¡ESTAN SOLOS EN MEDIO DEL DESIERTO!!! En fin, el director no debía estar mirando. La hoja del cuchillo, lo veremos más veces, está cromada, como los que tengo en la cocina. Un cuchillo cromado hace más de cien años. Nos lo muestra continuamente para que veamos cómo brilla y nos impresione. Me empiezo a mosquear.

¡Dame agua! le dice al indio el negro desesperado. Agarra la cantimplora y con gran ansia se echa un sorbo. Sí, solo un sorbo, no sigue bebiendo tras su carrera por el desierto. Le exige también comida, pero como la carroña que se había apretado antes estaba cruda, ahora espera pacientemente a que el indio se la cocine antes de tomársela mientras nos sigue mostrando el cuchillo. Ya sé que no voy a terminar de verla.

Tras esto se lía a hablarle el negro al indio y como este no puede escapar, se traga todo el rollo. Yo no y, antes de abandonar, le doy 5 minutos p'alante. Sigue hablando. 5 minutos más. Están en una construcción, se acercan dos malvados mejicanos en un carro blindado con un letrero: "Banco de Misas". Lo ve el negro y dice: "¡Qué bien! Tenéis un banco". El negro, un soldado desertor en la América de hace 150 años, sabía leer, normal. Aquí en esas fechas también se leía mucho. Más que ahora, incluso. Si la calidad de la fotografía no fuera penosa, parecería un spaghetti western. Me espero a que el negro dispare a los mejicanos y abra el carro, del que únicamente sacan decenas de pucheros para la cocina. Calma, no pasa nada. Paro mi reproductor y selecciono otra cosa.

Con todo lo dicho dejo avisado al que pase por aquí.
telemendenge
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