Pues nada. Nos encontramos una serie ambientada en la Grecia clásica, con algo de magia, brujería, guerras y batiburrillo habitual.
Lo malo es que además de que siendo una serie orientada a TV se notan unas grandes limitaciones, por momentos parece querer imitar, o beber, de fuentes como Hércules, Xena o incluso Espartacus.
Se queda lejos de todas ellas (incluso con la mentalidad del nivel de Hércules o Xena).

Las actuaciones en algunos casos no están mal, de unos pocos...
La historia quizás te llame la atención. Pero es que a partir de ahí el nivel se desploma.
Peleas patéticas, escenas de acción simplonas, escasez de extras para escenas exteriores y sobre todo los CGI.
En una época en que cualquier chaval acaba un curso de diseño y animación y hace un corto de categoría, estos tipos de un canal especializado en ciencia ficción y fantasía hacen animaciones y efectos gráficos que parecen hechos con el Paint.

Inadmisible. Muchos agujeros para darle coba a una serie que no aporta más que un par de actores medio decentes.