Uno de esos magníficos telefilmes setenteros de misterio y ciencia-ficción, con muchos puntos de coincidencia con la serie "Dimensión Desconocida" pero también con clásicos literarios de la sci-fi como "Amos de títeres" de R.A. Henlein y que se adaptó al cine como "Las sanguijuelas humanas" y posteriormente "Alguien mueve los hilos". Y también tiene aires de "La invasión de los ultracuerpos".

Tras recuperarse de un accidente automovilístico, el protagonista y su mujer, una pareja en crisis, llega a un pueblo de paso. Esa noche, James Franciscus verá algo que no entiende. A partir de ahí, el personaje pasará por la incredulidad de si mismo, la incredulidad de los otros hacia él y el descubrimiento, por fases, de lo que ocurre. No es un telefilme de terror, pero si de misterio.

Y esta bastante bien llevado, de la mano de Ted Post, que ese mismo año y con Franciscus, rodaría la segunda parte de "El planeta de los simios". Post sabe transmitir la tensión de la situación que vive el protagonista, leer sus reacciones, que pasa de la sorpresa, a la desesperación, a la búsqueda de explicaciones y a los sentimientos de amor y miedo. En ello ayuda el plantel, que ejecutan con profesionalidad sus papeles.

El telefilme se ve con gusto. Buen guión y llevado con notable pulso.