Cine negro nipón de primer nivel es lo que ofrece esta propuesta de Yasuzo Masumura, un realizador olvidado pero que desde luego merece mejor consideración. No fueron pocas las películas sobre la yakuza que se rodaron en los '60, pero ciertamente me sorprendería que hubiese muchas más del calado y la fuerza de "Afraid to Die", una pequeña joyita que nos presenta la historia de Takeo Asahina, un yakuza al que se la tiene jurada el clan rival debido a que apuñaló en el pasado al líder de estos. Se abre el film con una cámara subjetiva desde un coche y luego nos lleva a la prisión. Takeo tiene una visita, pero está jugando al voley en el patio. Quizá ya se huele algo, pues está a punto de salir y le quieren muerto; un compañero accede a hacerse pasar por él y cuando llega a la sala de visitas es disparado hasta su muerte. Sobrevuela el peligro por la cabeza de Takeo en cada escena, dentro y fuera de la carcel. Es un cacería con presa fija, pero Takeo no es tonto; sabe en qué terreno se mueve, y cómo mover las fichas.

Masumura, un tipo de realizador raro, dotado de una mirada única y gran fuerza a la hora de trasladar la palabra (guión) a la imagen (escenas), tampoco tenía ni un pelo de tonto. Utiliza la cámara como quiere, se aprovecha del color para configurar codigos y personalidades que se entienden desde el primer segundo, filma como quien respira y aprovecha los espacios para cortar lo menos posible las situaciones. No hay cámara fija porque ésta siempre se mueve fluidamente entre sus personajes, que por cierto están sobresalientemente interpretados. Mishima encarna a Takeo como si él fuese así, creando un antihéroe de un carisma arrollador. Ayako Kawao, además de ser una belleza, es capaz de dar répica a Mishima sin despeinarse. Cada vez que uno de los dos sale en pantalla la película se enriquece hasta límites casi ridículos y cuando comparten plano dan una masterclass de cómo un par de actores pueden resultar creibles y tener una química palpable. Los secundarios rinden todos a buen nivel, sin nadie por encima ni por debajo; el casting es fantástico.

Ni siquiera el saber cómo acabará el film (con haber visto cuatro o cinco películas del género es fácil anticiparlo) merma la calidad de "Afraid to Die", un trabajo fantásticamente dirigido, con un guión notable y unas interpretaciones sensacionales. ¿Su único pero? Como siempre en Masumura, que no la conoce nadie. Recomendada.