Para muchos la película más floja de Don Bluth, aunque para mí, estéticamente la mejor. Bluth es una animador incomparable y esta película, sin la mitad de recursos de los que suele disponer Disney, hace alta gala de ello. La caricaturización de los pingüinos, su expresividad y sus movimientos están realmente bien, al iguál que su doblaje (sólo he visto esta película en versión original). Los escenarios de la película y la banda sonora también agradan. Por lo demás, una película de animación de héroe, chica y malo que se pelean por una gema meteórica, a veces sin distinguirse si la gema o la chica es el McGuffin.