Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Quatermain80:
8
Thriller. Drama El agente 326 de la Policía Estatal (Willy Fritsch) debe desbaratar una red de espionaje y detener a su cabecilla. El nº 326 desconoce que se trata del banquero Haghi (Rudolf Kein Rogge), quien trata por todos los medios de confundir al Servicio Secreto y neutralizar al nº 326, especialmente tras saber que su mejor espía, Sonja (Gerda Maurus), se ha enamorado del agente... (FILMAFFINITY)
24 de octubre de 2009
11 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un tanto oscurecida por su magna predecesora "Metrópolis", y por haber permanecido mutilada durante muchos años con un metraje 50 minutos inferior al original, "Los espías" es, sin embargo, una valiosa obra, tal vez no a la altura de las mejores creaciones de Lang, pero aún así llena de hallazgos y aciertos.

La película, restaurada por la Friedrich Wilhelm Murnau Foundation, se extiende a lo largo de 144 minutos caracterizados por un ritmo cambiante, sincopado; así, en un primer momento se suceden a gran velocidad actos de espionaje y la presentación de los personajes principales, para después entrar más lentamente en la historia de amor entre los protagonistas. Estoy de acuerdo con otras críticas en que esta parte es la más floja del filme, y que cuesta un poco hacerse a ella, pero todo lo compensan los últimos cuarenta minutos, trepidantes, magníficamente concebidos y narrados, que atrapan sin remedio y que contemplados hoy no pueden sino admirarnos, pues en ellos se condensan soluciones y tendencias que tras esta película se copiarán hasta la saciedad.

También se crea escuela en la concepción de los personajes, verdaderos arquetipos que funcionan eficazmente, especialmente en el caso de la espía enamorada Sonja (una bella Gerda Maurus), y aún más en el del villano-banquero Haghi (Klein-Rogge), que además de guardar un sorprendente parecido con Lenin, encarna al típico malvado que todo lo sabe y todo lo puede, encabezando una organización eficientísima llena de subalternos (años más tarde las películas de la serie Bond adoptarán un personaje y una organización similares). Incluso en otras cuestiones innova el filme, como los ingeniosos artilugios y métodos de espionaje empleados (tinta invisible, microcámaras, etc).

Todo ello rodado en un esplendoroso blanco y negro pleno de expresionismo que embellece una narración magnética y eficiente, como es habitual en el arte de Lang, un creador cinematográfico de primer orden que además tenía sentido de la oportunidad, pues no en vano los años en que se realizó la película fueron de intenso espionaje entre las grandes potencias.
Quatermain80
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow