Haz click aquí para copiar la URL
España España · Honor al Sabadell!
Voto de Grandine:
7
Thriller. Terror. Drama Félix es un arquitecto que siente cómo su equilibrio mental y emocional se resquebraja cuando su novia Vera lo abandona. Una noche, llama a su puerta un desconocido que quiere hacer una llamada telefónica, pero, en un momento de descuido, el individuo desaparece dentro de su enorme casa sin dejar rastro alguno. A partir de ese instante, debido a ciertos fenómenos cada vez más angustiosos, Félix tiene la convicción de que el intruso vive ... [+]
2 de mayo de 2008
76 de 95 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sorprende que a estas alturas la capacidad para agarrar una historia con ecos de Polanski de forma tan sobria y potente, sin movimientos oscilantes y sin palpitar, pueda dar un resultado tan holgadamente sugestivo, pero no por los aciertos o desaciertos de los intérpretes, o porque el autor sepa o no ofrecer el pulso adecuado a las secuencias de más peso, sino porque mantener un relato de estas características durante casi dos horas, y que no decaiga, no de instancias a apartar la vista de la pantalla o no decrezca con una idea que podría redundar sobre si misma hasta hastiar y no lo hace, tiene mérito, muchísimo mérito.
Pero sorprende más todavía como Morales se recrea sólo lo necesario en cada recoveco y fascina momento tras momento, rompiendo los esquemas, presuposiciones o ideas preconcebidas que cualquier espectador pudiera haber formado sobre el hábil juego conformado por el realizador catalán.

Tras minutos tan vigorosos donde la tensión y las buenas maneras desbordan cualquier expectativa gracias a un manejo de la cámara brillante, una banda sonora que crece en los momentos de mayor incertidumbre y una trama que aprovecha el desequilibrio psicológico de un protagonista que va desestabilizando la balanza a cada segundo que pasa, "El habitante incierto" culmina con un final que, si bien no parece el mejor que se le podría haber dado, deja todos los cabos atados y el global queda perfectamente explicitado gracias a la perspicacia de Morales en llevar a buen termino determinadas secuencias que dan la coherencia necesaria a un juego tan astuto, como hábil y asombroso.

Temas como el voyeurismo, la descomposición o el desequilibrio de una persona que se torna en curiosidad por darle la vuelta a la tortilla, forman el eje perfecto para que este fantástico trabajo firmado por un debutante que no parece tal, nos haga remover y estremecer en la butaca gracias a una cinta realizada minuciosamente en cada encuadre, en cada tono, una cinta que bien podría haber firmado Polanski en sus mejores tiempos pero que, sin embargo, por nada cambiaría estar como está. Porque Guillem Morales tiene madera, porque Andoni Gracia está colosal y porque aquí residen las esperanzas de un cine español cada día más apagado, en esos pequeños habitantes inciertos que nos hacen disfrutar con obras de tamaño nivel. Magnífica es poco.
Grandine
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow