Hace unos años unos chicos en una pijamada juegan a gastar bromas por teléfono. De repente, llega un hombre encapuchado con un hacha y hace una masacre con los padres de todos, que daban una fiesta en la habitación de al lado. Años más tarde unos chicos de universidad hacen una fiesta en una mansión aislada y deciden jugar a gastar bromas por teléfono sin saber que las consecuencias serán las mismas.

Película que vi hace muchísimo tiempo y que volví a ver hace unos días porque tenía un buen recuerdo de ella y la verdad es que sin ser nada especial a mí me resultó entretenida. Recordaba dos cosas; el personaje homosexual y la rabia con la que el asesino los va matando. Y ahora además viendo al director —su foto— entiendo por qué hay tanta mezcla interracial en la película.

Total, si tienes ganas de ver un slasher de los de toda la vida la verdad es que no es tu peor opción.

(Ni una película sin crítica).