...victimista de mierda. Eso es porque no conoces al pingüino emperador. El pingüino emperador, cuando tiene ganas de intimar con una hembra tiene que caminar no se cuantos días por encima del hielo hasta llegar a un punto de reunión; y a parte de que caminar no se le da precisamente bien, en esas latitudes hace un frío del copón ¿Sabes? Cuando llegan ahí, los que llegan, porque algunos se mueren; quizás son demasiado feos y no encuentran pareja... ya ves, tantos kilómetros para nada. Sin olvidar que hace frío, mucho frío. Espérate, que además tienen que hacer malabarismos con el huevo que ponen, lo tienen que aguantar con los pies porque si toca el hielo se congela... ya ves. Por si eso fuera poco, después uno de los padres tiene que caminar hasta el mar (sí, otra vez a caminar) para ir a buscar comida; y encima la puta foca leopardo le estará esperando. Después de conseguir comida... vuelve otra vez antes de que se abra el huevo, ¡que si no tu hijo se va a morir! Mientras tanto la madre ya se habrá pasado no sé cuantos días sin comer. Y además hace frío, mucho frío. Así, maldito quejica, que sólo haces que quejarte; antes de lamentarte de lo dura que es tu vida acuérdate de los pingüinos ¿vale?