"Sleepwalk with me" parece como un guión de stand-up adaptado a cine donde actores interpretan las ideas surrealistas que plantea cualquier stand-upista.

Por momentos -y sólo por momentos- como espectador te llegas a identificar con el protagonista que como stand-upista que es, cuenta la historia de forma muy subjetiva y en primera persona. El problema del film es que su discurso narrativo se pierde y por momentos parece que no va a ninguna parte por lo que no te deja mucho cuando acaba, incluso se vuelve bastante reiterativa con los episodios que cuenta: los chistes malos, la relación de pareja que no avanza, los sueños, etc.

Además el tipo es un inmaduro, un completo pelotudo que incluso contando su propia historia "peca" de sincero y no hace ni medio esfuerzo por simular ser menos infantil como para que te coloques de su bando y no del de la novia. Es que ella siempre tiene razón, él no sabe lo que quiere y actúa como si tuviera 5 años.

Curiosamente aunque sea un film que parece menor, cinematográficamente tiene varias virtudes. Un plano secuencia genial en el hotel antes de ver el vestido por la web. Y las dos corridas, la "olímpica" y la ensangrentada, ambas encuadradas desde el ras del suelo.

También destacar que logra mostrar los estados del sueño y el sonambulismo con varios aciertos aunque precisamente el tema del sueño no sea del todo el centro de la historia.

Por cierto destaco una frase inspirada del amigo Birbiglia donde explica lo que para él significa el amor: -No importa cuán baja sea nuestra autoestima, hay una parte de nosotros que piensa: "Tengo una habilidad secreta que nadie conoce.". Y un día nos encontramos con alguien que dice: "Tienes una habilidad especial secreta ". Y eso es el amor.

Lo mejor: el riesgo de rodar un film basado casi que en un guión de stand-up.
Lo peor: un protagonista que no se merece a si mismo, genera poca empatía con el espectador.