A esta película le falla algo muy pequeño, que es que quiere ser muchas cosas en una. Quiere ser wetern, quiere ser película de acción, quiere ser intimista y quiere ser cine negro. Y hay que ser muy bueno para poder mezclar coherentemente estos registros tan dispares. Sólo los maestros lo han conseguido, pero agradezco el intento. Y lo admiro.

Como nota en mi opinión es un 9'5 porque el final es demasiado condescendiente y se pierde un poco en sus fuegos de artificio con una trama in crecendo tan notable. El final para ser una película redonda podía haber sido otro, un poco menos satisfactorio. Me hubiese gustado ver al sheriff como lo encontramos al principio: sordo, gordo y solo. Sin placa ni ciudad a la que proteger, alejándose en un atarder cuando casi se ha caído el sol, en el ocaso de su vida y sabiendo que ha salvado la situación a cambio de entregar todo lo que tenía. Ojalá hubiese acabado como Donnie Brasco.